El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha defendido hoy que la memoria histórica es "la gasolina patriótica del futuro" que debe servir para construir "una sociedad más justa que nada tiene que ver con admirar a los ricos o a los reyes o una idea torpe y uninacional de nuestro país".

En un acto en València de homenaje a las víctimas del franquismo en el que ha sorteado previamente a los medios de comunicación y ha conversado con Enriqueta Horcajuelo, hija de un fusilado durante ese régimen, Iglesias ha defendido que la memoria histórica es "importante y peligrosa" porque, según ha dicho, "nos permite construir un proyecto de patria para el futuro".

Tras relatar la historia de su padre y su familia, Enriqueta, que vestía una camiseta con la imagen de su padre vestido con el traje del ejército popular, ha pedido al líder de Podemos que cuando vaya al Parlamento "intente por favor que no se olvide la memoria histórica" porque ella "no se va a rendir" y nadie "la va a doblar".

Bajo el lema "Memorias para construir el futuro", el acto se ha centrado en una conversación entre ambos, coordinada por la secretaria de Igualdad de Podemos de Castilla-La Mancha, Ana Navarrete, y ha servido para homenajear a las familias de las 114.000 personas que se estima siguen desaparecidas desde el franquismo.

"Si los jóvenes supieran que los héroes y heroínas son quienes regaron de sangre y generosidad la tierra para dejarles un país mejor, comprenderían que la corrupción es un sistema de gobierno de clases y la necesidad de organizarse y construir entre todos una sociedad más justa, reivindicando valores patrióticos que nada tiene que ver con admirar a los ricos o a los reyes o una idea torpe y uninacional de nuestro país", ha añadido Iglesias.

El líder de Podemos ha asegurado que "la memoria histórica es la gasolina patriótica del futuro para construir una idea de país que no agreda a nadie y se construya como una patria que cuide y en la que la mejora de las mujeres es el ingrediente más importante".

Iglesias se ha preguntado por qué molesta tanto la memoria histórica y ha asegurado que es porque "es hablar de España y de lo mejor de España, de su héroes y heroínas", que no es ni la monarquía ni los empresarios.

Son, ha dicho, "los que lucharon por los derechos de la mujer, las condiciones laborales, justicia social, exigir servicios públicos, la reforma agraria, desarrollo económico sensato; lucharon por lo deseable: la democracia y la justicia social".

Ha recriminado la "milonga de que a España hay que identificarla con la monarquía", para él, sinónimo de "corrupción, elecciones amañadas y límite al desarrollo democrático" y ha dicho que "es mentira" que "para ser buen español ha que ser como Amancio Ortega".

Enriqueta, que se ha llevado los aplausos más sentidos y se ha emocionado en algún tramo de su relato, ha asegurado que su padre era un jornalero de campo, "muy buena persona y justo", que "no estaba de acuerdo con lo que los caciques del pueblo hacían a los trabajadores".

Ha recordado que cuando lo apresaron, le pegaron palizas y finalmente fue fusilado a las 6.30 horas del 27 de octubre de 1942 por un pelotón de la Guardia Civil en Talavera de la Reina, y ha acabado su intervención reclamando la tercera República.

La responsable de Memoria Democrática de IU, Esther López Barceló, y el secretario general de Podemos de Castilla-La Mancha, José García Molina, también han tomado la palabra en el acto, donde se han proyectado varios vídeos, para reivindicar la recuperación de la memoria.

Navarrete ha asegurado que Enriqueta "representa a los españoles que quieren algo tan humano como recuperar los restos de sus familiares y se encuentran con el impedimento administrativo" y ha deseado poder culminar la exhumación de los restos de Enrique Horcajuelo.

Al inicio del acto, tres personas se han levantado con sendos carteles para reivindicar: "La pobreza también mata, renta básica".