Pasa pocas veces, pero ahí están las excepciones que se llevan titulares. Un lotero al que le ha tocado la lotería. Se trata de Raúl Garijo, vecino de Utiel, localidad donde han caído 2,4 millones de euros repartidos en 40 series del quinto premio, el 03278.

Tanto él, lotero de la ONCE, como el resto de miembros del Club de Pesca Black Bass, se han repartido gran parte de este premio, excusa perfecta para celebrar a lo grande estas Navidades. «Haremos alguna cena especial o fiesta, no lo sé. De momento el teléfono no para de sonar», explicaba a Levante-EMV desde su puesto en la calle canónigo Muñoz de la localidad de la comarca de Requena-Utiel, a apenas 50 metros de la administración número 2 de donde salieron las 40 series de ese quinto premio que ha regado de millones a decenas de vecinos.

No sólo han resultado agraciados ellos, que son unos 70 miembros, sino que se ha repartido por el resto de la comarca en localidades como Villargordo del Cabriel, Las Casas o Las Cuevas. Décimos y papeletas entre socios y sus familiares que han ido extendiendo una extensa red de premiados. «No es mucho dinero, pero es una alegría», comentaba Raúl.

«Es la primera vez que me ocurre algo así. Yo reparto dinero, pero nunca me toca», ha contado el vecino de Utiel. Raúl es el vendedor de cupones de la ONCE, está acostumbrado a premiar a la gente, no a ser el premiado.

De 1.000 a 9.000 euros

Junto a él fueron llegando a lo largo de la mañana distintos ganadores, que se han llevado pellizcos desde 1.000 a 9.000 euros, como es el caso de Raúl. «No da para dejarse de trabajar», lamenta. Otros compañeros del club de pesca pasaban y pitaban desde el coche. Como decían, es poco, pero lo suficiente como para alegrar a uno el día y las Navidades.

Raúl se enteró del premio cuando vio a la administradora de esta oficina, Remedios Fernández, salir corriendo desde el bar donde estaba almorzando junto con su hija. «Ha empezado a hacerme gestos y enseguida he entendido que me había tocado», explicaba ayer emocionado.

Esta oficina de Utiel no es novel en esto de repartir suerte. Como cuenta orgullosa su propietaria, repartieron en 1998 un 4º premio, en 2001 un segundo y en 2006 un tercero del Niño. Además también vendieron un segundo premio en 1998 de un sorteo en mayo y el mas reciente, un primer el pasado mes de agosto. «La familia Alarcón lleva dos generaciones trayendo suerte a Utiel», indicó.

«Cuando me lo han dicho han empezado a temblarme las manos y las piernas. En la vida me ha tocado nada», exclamaba Aure Gómez. Lleva dos papeletas. «Ojalá hubiera conseguido más», lamenta ahora. Pero no se queja, su sonrisa la delata. «De momento vamos a celebrarlo esta Navidad. No se puede hacer mucho, pero algo es algo. Todavía no me lo creo», añadía.