El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, anunció ayer, durante su comparecencia para hacer balance del presente ejercicio, que el próximo año se inaugurarán cinco tramos de la red de ferrocarril de alta velocidad (AVE).

Rajoy incluyó en esta categoría de «AVE» la instalación del tercer hilo entre València y Castelló para que puedan circular trenes de ancho europeo, a pesar de que los trenes no podrán sobrepasar los 200 km/h. Este nuevo tramo de ancho europeo entre las dos capitales valencianas lleva en pruebas desde el pasado mes de marzo, pero el Ministerio de Fomento no aventura a dar una fecha concreta de la puesta en marcha del tercer hilo, que sólo se ha instalado en la vía lado mar, por lo que los trenes en ancho europeo tendrán que circular en vía única cuando vayan o vuelvan de Castelló. El trazado, además, seguirá compartiéndose con las circulaciones de Cercanías, larga y media distancia, regionales y mercancías.

Además, tal como adelantó Levante-EMV, este tramo del corredor mediterráneo entre València y Castelló no tendrá el sistema europeo de señalización ERTMS (European rail traffic management system) hasta que no finalicen las obras de instalación del tercer hilo en las vías del lado «montaña» entre ambas ciudades. «No se puede colocar ERTMS en una línea cuando en la otra vamos a trabajar», admitió el ministro de Fomento, Íñigo Gómez de la Serna,tras la información adelantada por Levante-EMV de que en este tramo ferroviario no se operará con el sistema más fiable, el ERTMS.

Los otros cuatro tramos de alta velocidad que se pondrán en marcha son Venta de Baños (Palencia)-Burgos; Zamora-Pedralba de la Pradería (Zamora); Chamartín-Atocha-Torrejón de Velasco (Madrid) y la llegada del AVE a Murcia. Rajoy señaló también que en 2018 están previstos «importantes avances» en el corredor mediterráneo y que se dará «un gran impulso» al plan de infraestructuras en carreteras, que contempla inversiones de casi 2.000 millones de euros durante el próximo ejercicio. El miércoles, Rajoy también anunció en Murcia el inicio de las actuaciones del Plan Extraordinario de Inversiones en Carreteras (PIC), que prevé movilizar 5.000 millones.