Salvador Puigdengolas Rosas, ingeniero industrial por la Universidad Politécnica de València y funcionario de carrera en la Generalitat, fue elegido ayer tarde nuevo decano del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana. La designación se produjo en el transcurso de la junta de gobierno, «que ha consensuado su candidatura desde la unanimidad», según informó la entidad en un comunicado.

Puigdengolas sucede en el cargo a Miguel Muñoz Veiga, quien presentó ayer mismo su dimisión tras cuatro años en el cargo y cuando le faltaba uno para culminar su mandato. El dirigente consideraba que, llegado a los setenta años, era el momento de dejar paso a un ingeniero industrial más joven. Aún así, Muñoz se mantendrá como miembro de la junta de gobierno del colegio y seguirá como vicepresidente del Consejo General de Colegios de Ingenieros Industriales de España, donde está liderando el desarrollo de un proyecto de digitalización junto al Ministerio de Fomento.

El nuevo decano asume el cargo «desde la voluntad de promover una institución cohesionada territorialmente y moderna, volcada con el servicio al colegiado y a la sociedad en su conjunto, desde un aspecto profesional, de transformación digital y de mejora de la empleabilidad y la calidad de vida en nuestra sociedad, siempre desde un contexto donde la igualdad de género, la transparencia y el diálogo se desarrollen día a día», según la nota. Salvador Puigdengolas cuenta con un «amplio desarrollo profesional, tanto en la gestión pública como privada, en los campos de la ingeniería, la construcción y en gestión en ámbitos como el mantenimiento industrial, la gestión de calidad en los procesos industriales y la economía y gestión de la salud».

Fuentes próximas al ya ex decano destacaron que durante sus cuatro años al frente del colegio ha llevado a cabo una labor muy destacada en pos de la cohesión territorial, fomentando la integración de los colegios de Castelló y Alicante. Otra de sus principales labores ha sido el desarrollo del programa Impulsa, dirigido a jóvenes ingenieros desempleados menores de 30 años. Las citadas fuentes explicaron que al menos la mitad de las personas que se presentaron a esa iniciativa han logrado a posteriori un puesto de trabajo gracias a ella.

Además de potenciar la formación, Miguel Muñoz Veiga «ha hecho partícipe a la profesión de los principales debates sociales, políticos y económicos de la Comunitat Valenciana» a través de los tres observatorios presentados a lo largo de su mandato. Se trata de unas macroencuestas mediantes las cuales los ingenieros industriales de la autonomía se han posicionado sobre temas candentes de la actualidad. En muchas ocasiones, con un espíritu ciertamente crítico.