Atención al ciudadano a oscuras. Así trabajan los funcionarios del Servicio de Información y Atención ciudadana (SIAC) y del Servicio de Orientación Jurídica (SOJ), ubicado en la planta baja de la Ciutat de la Justícia de València. El problema reside en que el sistema de iluminación está empotrado a un techo situado a 6,8 metros de altura. «Y sus puntos de luz, conforme se han ido fundiendo, nunca han sido sustituidos», constata el último inspector de trabajo y seguridad social que ha elaborado un informe al respecto. La Inspección de Trabajo ha dado un mes a la Conselleria de Justicia para que «combata la deficiente situación de iluminación localizada, con los consiguientes problemas de contraste y deslumbramiento que ello implica».

Este problema se arrastra, como mínimo, desde hace ocho años. El primer antecedente por la falta de iluminación en el SIAC se remonta al 20 de julio de 2009, cuando ya se hizo un requerimiento a la Conselleria de Justicia (entonces dirigida por Serafín Castellano) para que elaborara un «plan de mantenimiento periódico».

La situación seguía igual el pasado mes de julio, cuando se hizo la última visita de los inspectores a las instalaciones que dependen del decanato. Una revisión que permitió comprobar que existían «hasta 12 lámparas en el SIAC y cinco tubos fluorescentes en el pasillo de acceso fundidos». De hecho, en todas las mediciones higiénicas realizadas en los últimos años los ocho puestos de trabajo analizados tienen niveles de iluminación muy por debajo del valor de referencia legal.

La Conselleria de Justicia tomó cartas en el asunto y «se decidió el cambio del sistema de iluminación de ambos servicios, consistente en la instalación de luminarias suspendidas con tecnología LED, por lo que se elaboró el pliego de prescripciones técnicas particulares para el contrato de ejecución y se adjudicó el pasado 20 de septiembre». Aunque, a pesar del «tiempo transcurrido desde el requerimiento, algo más de cuatro meses, el déficit de iluminación persiste en todos los puestos de trabajo del SIAC y del SOJ». Para poder trabajar, es habitual ver a los funcionarios alumbrados por flexos «para combatir la deficiente situación de una iluminación localizada, con los consiguientes problemas de contraste y deslumbramiento que ello implica, por lo que se da por incumplido el requeremiento de referencia», advierte la Inspección de Trabajo a la Conselleria de Justicia.