Un análisis de la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) enviado al juzgado de Instrucción número 2 de València, que investiga presuntas irregularidades en la organización del Gran Premio de la Fórmula 1, revela que en la contratación del servicio de sistemas de comunicación digital se «construyó» un expediente con posterioridad a lo que formalmente figura en los distintos documentos, mediante la generación de cartas de invitación, del informe técnico de las ofertas y del contrato ad hoc.

En este procedimiento figuran como investigados el expresidente de la Generalitat Francisco Camps -que declarará el 24 de enero-; la exconsellera Lola Johnson; el expiloto Jorge Martínez Aspar; Belén Reyero, que fue responsable del departamento de Eventos de la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunitat Valenciana y persona de confianza del ex presidente y Nicolás Figueras, exdirector de esta entidad.

Mientras, la directora de gestión del Circuito del Motor, Blanca Tomás, avisó por correo electrónico en mayo de 2012 al director general, Gonzalo Gobert, del trasvase de fondos a la empresa Valmor, organizadora de la Fórmula 1 en València, y alertaba de que la Generalitat aún no les había ingresado nada para el evento y de que ella no pagaría nada más hasta tener las partidas destinadas a ellos.

«Gonzalo, la Gva, aún no nos ha ingresado nada para la F1 y ya llevamos traspasado a Valmor 1,3 millones, como ya sabes, hay que ir con mucho cuidado», le dijo.