La carrera electoral más larga al rectorado de la Universitat de València (UV) -un mes de campaña más 10 días de previa- arrancó ayer con la presentación de candidaturas, que al final serán tres. Dos catedráticas, la vicerrectora Mavi Mestre y Mª Antonia Benau, y el catedrático Vicent Martínez pugnarán por suceder a Esteban Morcillo tras su segundo y último mandato de cuatro años. Las elecciones serán el 22 de febrero, aunque si nadie logra la mayoría absoluta (más del 50 % del voto ponderado) habrá una segunda vuelta entre las dos listas más votadas el 6 de marzo.

Pese a que hasta el 30 de enero no acaba el plazo para que los tres aspirantes presenten ante la junta electoral de la UV su programa y los nombres de los miembros de sus respectivos equipos, Mavi Mestre exhibió músculo al comparecer con casi toda su candidatura. De momento le acompañan 12 profesores, cinco mujeres y siete hombres, con los que aspira a convertirse en la primera rectora de una universidad pública valenciana.

La lista de Mestre integra a cinco de los 9 vicerrectores actuales, además de ella: Isabel Vázquez (Estudios), José Luis Gandia (Economía), Jorge Hermosilla (Participación) y Antonio Ariño (Cultura), e incorpora a tres decanos de grandes facultades -Mª Elena Olmos (Derecho), Carles Padilla (Filología) y Ernest Cano (Sociología).

La mayoría, 8 de los 13 hombres y mujeres de esta candidatura, son caras nuevas y en ellas sobresale el vicedecano de Economía, Joaquín Aldás, que fue el claustral más votado de esta facultad (la más grande de la UV) en las elecciones al Claustro del pasado noviembre.

Los universitólogos más veteranos, a la hora de evaluar las posibilidades de un aspirante, confieren un gran valor al número de claustrales que atrae cada candidatura. En este sentido 11 de los 13 integrantes de la candidatura que lidera Mestre son claustrales, dos de ellos los más votados en su facultad. Además del ya citado Aldás, la misma candidata fue la que más apoyos logró en Psicología, otra de las grandes facultades. A su favor también juega que los tres rectores que se han sucedido en los últimos 24 años (Pedro Ruiz, Francisco Tomás y Morcillo) encabezaban las listas como vicerrectores salientes.

«Garantía en la gestión»

Mestre, catedrática de Psicología Básica que pertenece a la primera promoción de licenciados de la Facultad de Psicología de la Universitat, de la que también fue su primera decana, presenta como aval su experiencia en gestión universitaria (lleva 12 años como vicerrectora). Aspira a «seguir trabajando por el cambio, por el progreso, por mejorar la UV y abrirla más al mundo».

«Participación, diálogo y consenso» son las tres palabras que más repite, además de subrayar que cuenta «con un equipo con garantías de éxito y garantía en la gestión». Su objetivo central es «mejorar el servicio público que ofrece la Universitat, mejorando las condiciones laborales de todas las personas que trabajan en ella así como las posibilidades de futuro de sus estudiantes».

La segunda en registrar su candidatura ha sido García Benau. Esta catedrática de Economía Financiera y Contabilidad hizo historia en 2010 al ser la primera mujer en optar a rectora. Le aguantó el pulso hasta el final a Morcillo, que necesitó dos vueltas para acceder al primero de sus mandatos como rector. Perdió las elecciones por 14 puntos. Aunque a última hora, hasta las 9.30 horas de la mañana de ayer no anunció que se presentaba, García Benau ha decidido dar el paso porque «sigue vigente» el «gran compromiso con esta universidad que demostré hace 8 años».

«Espero ser la primera rectora de la UV», subraya, para a continuación incidir en que quiere transformar la Universitat «para hacer frente a todos los retos». Para ello apuesta por «un modelo de calidad universitaria que potencie la innovación, la internacionalización y una mayor autonomía». El «modelo de gobierno diferente» que propondrá cuando presente programa y equipo indicirá en «una mayor transparencia de la Universitat y más rendición de cuentas ante la sociedad».

El último en registrar su candidatura, aunque hace un año que ya anunció que lo haría, ha sido Vicent Martínez. Este catedrático de Astronomía, que en 2014 se convirtió en el primero que se atrevía a disputarle en la urnas a un rector de la UV su segundo mandato, llega con ganas a de volver a fraguar el «movimiento por el cambio» que lideró hace cuatro años cuando logró el 41 % del voto ponderado frente al 59 % de Esteban Morcillo.

«Candidaturas continuistas»

Martínez se ha mostrado batallador desde el primer segundo. Frente a las otras dos candidaturas, que tacha de «continuistas», subraya su propuesta de «cambio seguro y en positivo». «Somos una candidatura abierta, no improvisada de ayer a hoy como otras», concluye. Promete «un programa de todos y para todos», con el fin de lograr «un cambio necesario» en la UV.

Se muestra crítico con «el continuado declive de la Universitat en los rankings internacionales», algo que «no se puede justificar solo en los recortes», pues a su juicio la gestión de la UV «no ha sido lo suficientemente eficaz». También censura la política de personal, área que hasta ayer dirigió Mavi Mestre, al señalar que la «precariedad» del profesorado asociado y el «envejecimiento» del claustro «han bajado la calidad de la docencia».