El diputado de Compromís en el Congreso, Ignasi Candela, ha mostrado hoy la “estupefacción” de su grupo por el “agravio comparativo que supone que se haya desbloqueado la tramitación en la Cámara Baja de la reforma del estatuto canario y se mantenga bloqueada la reforma del estatuto valenciano”.

Candela ha exigido respuestas al PP y Ciudadanos: “Queremos saber las razones ocultas detrás del desbloqueo, porque esto no tiene ninguna justificación”.

Candela ha denunciado que mientras la propuesta de reforma del Estatut de la Comunitat Valenciana ha sufrido por el momento más de 40 ampliaciones y lleva aparcada más de un año, la reforma del estatuto canario llegó al Congreso en febrero de 2017. “No es razonable que PP y Ciudadanos necesiten más tiempo para estudiar la reforma de dos páginas de nuestro estatuto que para estudiar la reforma de 57 páginas del Estatuto de Autonomía canario”, ha afirmado Candela.

El diputado ha explicado que el Proyecto de Reforma del Estatuto de Autonomía de la Comunitat Valenciana empezó el plazo de enmiendas el 10 de noviembre de 2016 y PP y Ciudadanos pidieron la última ampliación del plazo de enmiendas a finales de diciembre. Por el contrario, en el caso del estatuto canario, que llevaba desde el 13 de febrero de 2017 en plazo de enmiendas, el PP y C’s solicitaron la última ampliación el 30 de octubre, por lo que el al finalizar el plazo éste ya no se amplió y pasó a la ponencia que se reunirá el próximo jueves 18 de enero.

La canaria es así la primera reforma estatutaria que se tramita en esta legislatura. Cuando concluya, le debería tocar el turno a las otras dos que están en cola: la valenciana, pendiente desde 2011, y la murciana, que el Congreso aceptó tramitar este mes de septiembre.

El punto clave de la reforma valenciana es garantizar un nivel de inversiones del Estado equivalente al volumen de la población de la Comunitat Valenciana, que representa cerca del 11 % del total de España. Este hecho nunca ha sucedido en la historia reciente.

El texto fue aprobado en las Corts Valencianes en 2011, con el PP al frente del Consell. En plena crisis, sin embargo, el Gobierno de Rajoy decidió dejar a un lado la propuesta valenciana durante la legislatura en la que tuvo mayoría absoluta. La inestabilidad parlamentaria posterior completa el cuadro de arrinconamiento de la propuesta valenciana.

Finalmente, el pleno del Congreso dio luz verde el 4 de octubre de 2016 al inicio de la tramitación parlamentaria de la reforma del Estatut valenciano.

Desde entonces, el proyecto suma más de cuarenta aplazamientos ya. Y seguirán, porque de momento es la tramitación del texto canario la que va adelante. Las otras deberán esperar.

Un elemento importante es que, tras el paso por la Comisión Constitucional y el pleno del Congreso, la reforma del Estatut deberá ser ratificada en un referéndum en la Comunitat Valenciana, una cita para la que nunca es fácil encontrar la fecha más adecuada.

El caso canario

El nuevo Estatuto de las islas fue aprobado en Canarias en 2015, con los votos del PSOE y Coalición Canaria, el no del PP y la abstención de Nueva Canarias.

Sin embargo, tras el acuerdo entre los populares y CC para la investidura de Mariano Rajoy, el PP sí apoyó la toma en consideración del nuevo estatuto en el pleno hace un año, donde recabó el rechazo de Ciudadanos y Unidos Podemos, que aún no estaban presentes en el Parlamento canario cuando se redactó.

Este es el segundo intento de reforma que hace el Parlamento Canario, que ya remitió un texto al Congreso hace diez años, pero que no culminó su tramitación por falta de consenso, precisamente en lo relativo al sistema electoral.

Canarias carece de ley electoral propia y la propuesta de reforma incluye una disposición transitoria con el objetivo de que, hasta que se apruebe una norma específica, se pueda ir funcionando con un sistema de 60 escaños con posibilidad de ampliarlos a 70.