El presidente de la junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, anunció que espera poder reunirse el próximo sábado, 20 de enero, con el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, para tratar «con tranquilidad las necesidades, sobre todo, de financiación» y advirtió de que no van a permitir al Gobierno de Rajoy que el conflicto catalán «y los problemas de Puigdemont y los independentistas sirvan para retrasar ya cinco o seis años las necesidades financieras de las comunidades autónomas».

Durante su intervención este pasado sábado en el acto de inauguración del 13º Congreso Provincial del PSOE de Cuenca, García-Page anunció, asimismo, que antes de que finalice el mes de enero va a dar a conocer «una cifra para que todo el mundo la tenga clara sobre la deuda que acumula el Estado por el simple retraso de la financiación autonómica».

En este sentido, adelantó que se trata de «mucho dinero que está dejando de ingresar la comunidad simple y llanamente por esa política de brazos cruzados con que Rajoy afronta casi todo». «A la vista está lo que ha pasado en Cataluña», espetó, para, a continuación, denunciar el «chantaje permanente» del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en relación con la sanidad, la educación y, en definitiva, «con el dinero que es de todos los españoles, que no es de Montoro».

García-Page consideró «absolutamente insultante que jueguen a chantajearnos» y, en concreto, «que lo haga, encima, alguien que ha tenido la mucha cara política de amnistiar a todos los defraudadores con una amnistía inmoral».

En España, criticó, «están bienvenidos todos aquellos que se han llevado dinero fuera» mientras el Ejecutivo central continúa «apretando las clavijas a las autonomías, a los ayuntamientos, a los que, incluso teniendo superávit, no se les deja gastarlo en interés social», sentenció el presidente de Castilla-La Mancha.