Salvo sorpresa de última hora, Francisco Camps no se librará de comparecer en el juicio por la financiación ilegal del PP que se está celebrando en la Audiencia Nacional.
Una vista que se reanuda mañana con las declaraciones de los dos últimos acusados: el exvicesecretario y exdiputado del PP David Serra y el presunto cerebro financiero de la trama Gürtel, José Ramón Blanco Balín.
El exvicepresidente del Consell Vicente Rambla ha comunicado al magistrado Vázquez Honrubia que mantiene toda la prueba propuesta para su defensa, entre los que se encuentran 39 testigos, uno de ellos Camps.
Un testimonio que se aguarda con expectación después de que Ricardo Costa, su hombre de confianza en el partido, y también acusado en este proceso, mantuviera ante el magistrado que el PP se financiaba con dinero negro y con aportaciones de empresarios con las que se saldaba la deuda que el partido tenía con Orange Market, la filial en la Comunidad de la trama de Francisco Correa. Un modos operandi cuya autoría atribuyó a Camps ayudado, según su relato, por el expresidente de las Cortes Juan Cotino, a quien también ha propuesto como testigo.
El número dos de la trama, Pablo Crespo, el otro acusado que también había llamado a declarar al expresidente de la Generalitat, va a renunciar a su testimonio, con lo que la presencia de Camps en la Audiencia Nacional únicamente se sostiene en la petición de Rambla. En principio está citado para el 7 de marzo, aunque el calendario podría sufrir modificaciones.
El exvicepresidente del Consell, quien en su declaración negó que tuviera conocimiento de las artes para alimentar las arcas del partido que relató su excompañero Costa, ha citado además a, entre otros, la exalcaldesa de Elda y senadora, Adela Pedrosa, la exregidora de Elx y diputada provincial, Mercedes Alonso, el exconseller y diputado Gerardo Camps, el alcalde de Crevillent y vicepresidente de la Diputación, César Augusto Asencio, y a los también exconsellers Paula Sánchez de León, Serafín Castellano, Manuel Cervera y Alejandro Font de Mora, actual vicepresidente de la Cortes.
Rambla se enfrenta a una petición de pena de casi ocho años de prisión por tres delitos electorales y uno de falsedad. En el listado presentado por su defensa también se encuentra el exconseller Rafael Blasco, actualmente cumpliendo condena en la cárcel de Picassent por el caso Cooperación, así como los últimos gerentes del partido, entre ellos Luis Bárcenas (también en prisión) y Cristóbal Páez.
Frente a esta profusa prueba, tanto Costa como el cabecilla de la trama, Francisco Corea, y Cándido Herreno, uno de sus empleados en Orange Market, han renunciado a todos sus testigos y a la documental propuesta. Tanto Correa como Costa han admitido los hechos de los que están acusados y el trabajador relató que sólo hacía lo que le indicaban.
