Simon Manley, embajador del Reino Unido en España, trasladó ayer a Ximo Puig, presidente de la Generalitat, todo el respaldo del Gobierno de su majestad la reina Isabel II a los promotores del centro comercial Puerto Mediterráneo en el término municipal de Paterna. Con ocasión de su visita a València para inaugurar un seminario sobre innovación y nuevas tecnologías en materia de sanidad pública, Manley comunicó a Puig que el proyecto sería «prioritario y buenísimo para el desarrollo y el empleo de la Comunidad Valenciana». Que, naturalmente, el Gobierno británico respetará «las decisiones de quién deba autorizar» la ejecución de las obras necesarias para levantar el complejo, pero insistió en que la iniciativa cuenta con «todo el apoyo de la embajada británica».
El proyecto para levantar un megacentro comercial está paralizado desde hace años por objeciones planteadas tanto por el Ayuntamiento de Paterna como por la Conselleria de Infraestructuras.
La iniciativa la impulsa la empresa Intu, una sociedad que gestiona 15 centros comerciales en el Reino Unido, diez de ellos entre los mejores 25 del país. El respaldo financiero al proyecto, cuya primera versión data de finales de 2011, corresponde a Eurofund Investments, una sociedad inversora con sede en Luxemburgo.
Sobre el papel, de acuerdo con la memoria elaborada por la sociedad conjunta constituida por Intu y Eurofund Investments en 2013 para levantar Puerto Mediterráneo, el complejo supone una inversión directa de unos 700 millones de euros, cuyos efectos inducidos podrían superar los 1.400 millones. La ejecución y posterior explotación del centro comercial generaría un mínimo de 4.000 puestos de trabajo entre temporales y fijos. Una vez más, el empleo inducido podría duplicar esa cifra, siempre según las estimaciones de los promotores.
El Consell presidido por Alberto Fabra elaboró una norma específica sobre áreas estratégicas para facilitar el desarrollo de la iniciativa. Pero los cambios de gobierno al frente de la Generalitat y del Ayuntamiento de Paterna han provocado un cúmulo de trabas que mantienen paralizado el proyecto.
Profesores de inglés
Al margen de las conversarcones tras bambalinas, Puig y Manley inauguraron juntos un seminario sobre innovación en la gestión de los sistemas públicos de salud valenciano y británico. Ambos coincidieron en una cerrada defensa de lo público en una breve alocución ante un grupo de técnicos y médicos en el Instituto de Investigación Sanitaria del Hospital La Fe.
En un cuentro posterior, el embajador británico se comprometió con Puig a colaborar en la búsqueda de soluciones para cubrir las vacantes de auxiliares de conversación de inglés del sistema público de enseñanza valenciana.
El jefe del Consell anunció la intención de financiar la presencia de mil auxiliares de inglés en las aulas valencianas (una proporción muy superior a la que se da en otras comunidades), pero hasta el momento solo se han podido cubrir unas 300 plazas.
El Brexit ha sido otro de los asuntos que trataron en el encuentro, insertado en una jornada de actos del embajador en València. Ambos representantes políticos han coincidido en buscar fórmulas para un Brexit «suave» que no afecte las relaciones comerciales ni el tránsito de ciudadanos.
