La Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació (CVMC) quiere ser restrictiva con la publicidad institucional de la Generalitat y las Corts, mientras el gobierno de Ximo Puig y Mónica Oltra no quiere inflar por la vía de la publicidad institucional el presupuesto de 55 millones que se ha comprometido a aportar anualmente para el funcionamiento de À Punt.

En esas cuitas andan los representantes del ejecutivo y de la nueva radiotelevisión pública con motivo de la elaboración del contrato programa.

La primera propuesta elevada al Consell restringía las campañas informativas del gobierno valenciano: «En ningún caso más de una mensual». Advertía además de que los gastos de diseño y producción correrían a cargo de la conselleria correspondiente.

El ejecutivo, según ha podido saber este diario, replicó con la petición a la CVMC de que eliminara las restricciones a la publicidad institucional de la Administración autonómica y de las Corts.

El consejo rector de la corporación abordó el asunto en su última reunión, en la que aprobó la versión definitiva del contrato programa, y asumió la gratuidad exigida, pero con condiciones: solo para las campañas de interés público y marcando una serie de criterios estrictos para definir estas.

Fuentes de À Punt subrayaron a este diario: «No todas las campañas pueden ser gratuitas». Para que puedan ser consideradas de interés público y no suponer coste al Consell, la propuesta del ente es que sea necesario un acuerdo del Consell o de las Corts con una decisión «motivada». Estas campañas, además, deberán tener un valor «informativo, urgente y relevante», agregaron.

Existe el temor en el consejo rector de que la televisión de À Punt, que está previsto que empiece a emitir la próxima primavera, se pueda poblar de publicidad institucional en una primera etapa y dar una imagen «desvirtuada» y «de propaganda».

De ahí las restricciones que ha tratado de establecer. Falta por ver ahora la posición que adopta el ejecutivo de PSPV y Compromís ante el último planteamiento de la corporación, que solo acepta parcialmente las consideraciones realizadas por el Consell.

El gobierno (especialmente, Presidencia) ha hecho evidente en diversas ocasiones su distanciamiento de la nueva televisión. la portavoz, Mónica Oltra, dejó ver esa actitud ayer mismo.