Ribera Salud ha abierto una nueva brecha judicial contra la Conselleria de Sanidad y ya van unas cuantas. La empresa gestora del departamento de salud de Torrevieja, la UTE Torrevieja Salud participada al 100 % por la firma del empresario Alberto de Rosa, ha recurrido ante los tribunales el acuerdo entre la conselleria y la fundación IVO para tratar a parte de los pacientes oncológicos de la Comunitat Valenciana a través de la nueva ley de acción concertada.
La UTE que gestiona Torrevieja ha sido la primera pero desde Ribera Salud ya han advertido que, como en el resto de acciones judiciales contra Sanidad, el recurso llegará a la Generalitat «por triplicado» ya que harán lo mismo desde las otras áreas de salud que gestiona de forma privada Ribera Salud al 100%: Elx-Crevillente y Alzira. Estos tres recursos se suman a la larga lista de pleitos (medio centenar según fuentes de la conselleria) que la empresa de Alberto de Rosa mantiene abiertos contra Sanidad desde que se decidió la vuelta a la gestión pública del hospital de Alzira el 1 de abril.
Fuentes de la empresa confirmaron que están por llegar los otros dos recursos «ya que no tendría sentido recurrir la Ley de Acción Concertada y luego no hacerlo sobre su aplicación». Y es que estos nuevos contenciosos se suman al presentado en su día contra la ley de acción concertada que ampara el nuevo convenio Sanidad-IVO y en el que se excluye a las empresas privadas. Ribera Salud trató, de hecho, que su aplicación se paralizara pidiendo el amparo del Defensor del Pueblo que estudió la queja pero la resolvió pidiendo correcciones a las Conselleria de Sanidad.
Una larga lista
Los nuevos recursos de Ribera Salud vienen a engrosar la larga lista de procedimientos judiciales contra la Conselleria de Sanidad: más de medio centenar. En su mayoría se han interpuesto desde que la consellera Carmen Montón hizo pública su decisión de no ir a la prórroga una vez se agotara el próximo 31 de marzo el contrato de Ribera Salud para gestionar de forma privada la Ribera. El primero paso para acabar con el modelo Alzira.
Desde entonces y hasta ahora, la empresa acumula medio centenar de recursos aunque solo unos pocos están directamente relacionados con la reversión del modelo Alzira. En su día Alberto de Rosa recurrió tanto la notificación de las normas de reversión -las pautas a seguir en el hospital hasta la reversión- como la decisión de no ir a la prórroga pese a preverlo el contrato. En ambos casos Ribera Salud pidió medidas cautelares y así lograron retrasar 45 días algunas de las órdenes de aporte de información que les impuso la administración pero el juzgado les denegó, por dos veces, la posibilidad de paralizar cautelarmente la reversión que se hará efectiva el próximo 1 de abril.
«No hay acoso y derribo»
Junto a la reversión y el acuerdo con el IVO, Ribera Salud ha recurrido cuestiones tan dispares como la distribución de fondos para el fomento del uso racional de fármacos o cuestiones internas de gestión o distribución de redes asistenciales. Por el volumen y la disparidad de los recursos, en conselleria entienden que la ofensiva judicial de Ribera Salud es una estrategia para desgastar el gobierno de Carmen Montón en la «batalla» de la reversión de Alzira. Fuentes de la empresa rechazaron ayer, que esta acumulación de recursos sea una táctica de «acoso y derribo» contra Montón. « Estamos defendiendo los derechos de los pacientes y utilizamos las herramientas que pone el Estado de Derecho a nuestro alcance para hacerlo», aseguraron ayer.
