La Generalitat ya tuvo que aportar seis millones de euros en gastos imprevistos por cuestiones heredadas de los antiguos gestores. Por un lado, destinó 4,3 millones en deducciones incorrectas realizadas en el IVA en patrocinios suscritos en los años 2009, 2010, 2011 y 2014, y aportó otros dos millones en repetir las obras del canal de drenaje por acometerse con defectos las anteriores. En este último caso, consiguió el retorno de 683.000 euros de la UTE de empresas que lo hizo.