Los niveles de calidad del aire de los diferentes contaminantes medidos en 2017 en la Comunitat Valenciana se mantienen por debajo de los límites exigidos en las directivas europeas.

Así lo contempla el estudio realizado por la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, que mide 24 parámetros contaminantes, entre los que están los valores de dióxido de azufre, dióxido de nitrógeno, partículas PM10, material particulado PM2,5, así como de monóxido de carbono, benceno y metales (plomo, arsénico, cadmio y niquel), así como del benzo(a)pireno; y seis parámetros meteorológicos.

Respecto al ozono troposférico, la normativa establece umbrales objetivos a alcanzar, no estableciendo un límite en cuanto a su obligado cumplimiento. En la Comunitat Valenciana, debido a las quemas agrícolas y las elevadas temperaturas se registró una superación del umbral el día 15 de junio en Caudete de las Fuentes y otra el 25 de octubre en la estación de medición de Buñol.

La conselleria ha solicitado en sucesivas ocasiones que el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, que elabore un Plan Nacional de Mejora de la Calidad del Aire para este contaminante.

En 2017 también se llevaron a cabo mediciones adicionales de la calidad del aire en zonas donde existía preocupación por las emisiones procedentes de actividades industriales en Villar del Arzobispo, Chiva, la Pobla de Vallbona, Xilxes y en las inmediaciones del polígono industrial El Serrallo de Castellón. Desde 2015, la Conselleria ha destinado cerca de un millón de euros a la renovación de los equipos técnicos.