A tenor de los datos recogidos en el reciente informe «Las facetas del bienestar. 2006-2015», publicado por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie) y la Fundación BBVA, la Comunitat Valenciana no mejora en materia de violencia machista.

Según datos de este estudio, la Comunitat lidera el ranking nacional en lo que se refiere a número de víctimas de esta violencia. En el año 2015, 16 de cada 10.000 mujeres valencianas contaban con una orden de protección o medidas cautelares tras ser agredidas por sus parejas o exparejas.

El segundo puesto de este triste podium lo ostenta Andalucía, seguida por Murcia, Castilla La Mancha y Baleares. Por contra, País Vasco y Cataluña presentan los datos más bajos de víctimas de violencia machista con medidas de protección aplicadas. Aunque los autores advierten: «los datos se refieren a casos en los que la justicia ha intervenido, es de sobra conocida la reticencia a denunciar de algunas mujeres e incluso de personas de su entorno».

Pese a todo, es necesario destacar que la evolución de los datos en positivo, puesto que la cifra de mujeres víctimas de violencia machista en el año 2011, era de más de 17 por cada 10.000 mujeres, rebajándose hasta 16 en el año 2015. Esta tendencia de bajada se aprecia en todas las regiones del país excepto en La Rioja.

Violencia doméstica

Es importante señalar la diferencia que establece la ley entre violencia de género o machista y violencia doméstica. Para que se catalogue una agresión física o psicológica dentro del primer grupo, esta debe ser ejercida sobre las mujeres por sus parejas o exparejas. Por su parte, violencia doméstica es la que tiene lugar en el hogar y puede ser sufrida por mujeres, hombres y cualquier miembro del hogar como niños o personas de avanzada edad.

Por lo que respecta a la violencia doméstica en la Comunitat, las víctimas masculinas se han incrementado en un 10,6 % entre los años 2011 y 2015. En cifras absolutas, en el último año que se considera en el estudio, 1,7 de cada 10.000 varones valencianos había sufrido violencia intrafamiliar por parte de un agresor de cualquier sexo, y contaba con alguna medida de protección. En el año 2011 esta cifra no llegaba a uno de cada 10.000.

En el caso de las mujeres el número de víctimas dobla al de los hombres, llegando a casi 2,5 mujeres las que han sufrido algún tipo de acto violento por parte de un miembro del hogar familiar -en este capítulo no entran las víctimas de violencia machista-. Durante los cinco años analizados, no ha habido una variación significativa ya que el aumento registrado es de un 0,1 % más.

En ambos casos la evolución de la Comunitat Valenciana es mala en comparación con la media nacional, puesto que tanto la violencia doméstica contra hombres y mujeres descendió en porcentaje. Entre 2011 y 2015 se produjeron un 5,4 % menos de agresiones contra varones y un 6,5 % menos contra mujeres.

Otro dato destacado en el estudio es que el 41 % de la violencia doméstica se ejerce sobre niños -considerando a estos como los menores de 18 años- y sobre personas mayores de 65, siendo estos dos los segmentos de población más vulnerables a este tipo de abusos.

Algo que llama la atención es que, si bien es cierto que la proporción de víctimas entre las mujeres es mayor, la diferencias según el género no son especialmente significativas cuando se padece la violencia que se lleva a cabo entre las paredes del domicilio familiar.