PSPV, Compromís y Podemos han registrado hoy en las Corts la nueva ley electoral valenciana que busca rebajar al 3% la barrera electoral e incluye otras novedades como las listas cremallera y la posibilidad del voto preferencial entre las candidatos y candidatas de una misma lista. Ahora bien, la inciativa tiene muy complicado salir adelante ya que Ciudadanos, que un principio pareció dispuesto a avalar la reforma, se ha descolgado envalentonado por las encuestas y hoy mismo ya ha avanzado que es muy difícil que den su apoyo a un texto que han tildado de "decepcionante".

Los diputados del tripartito que han comparecido al alimón en rueda de prensa ( Fran Ferri, Alfred Boix y Antonio Montiel) han mostrado cierto optimismo respecto a la posibilidad de que la ley se apruebe antes de 2019 y han asegurado que suguen abiertos al dialogo para poder alcanzar la mayoria suficiente de dos tercios. Su esperanza es Ciudadanos ya que el PP no tiene ninguna intención en que se rebaje la barrera electoral y no facilitará la nueva ley. El diputado popular Luis Santamaría asegura que es una ley "tapadera" para ocultar la mala gestión del Botànic y que una ley que no responde a los problemas de la ciudadanía.

El texto busca, según los diputados de la izquierda, ampliar la participación y la representatividad. Es un paso hacia las listas desbloqueadas ya que se da la opción a los electores de que mostren sus preferencia por tres personas de una lista. El cabeza de lista estaria blindado, pero podría darse la cirscunstancia de que un candidato o candidata que estuviera en situación de no salida avanzara hasta la segunda o tercera posición. Para ello necesitaría sumar al menos un 10% más de los votos a toda la lista.