El inspector de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional que dirigió la investigación sobre la trama Gürtel, Manuel Morocho, confirmó ayer en el juicio por la presunta financiación irregular del PPCV que la formación política regional usó una «doble fórmula» para pagar la organización de eventos y actos electorales a la empresa de la red corrupta Orange Market.

Un modus operandi que era una «forma sistemática» establecida por la trama corrupta encabezada por Francisco Correa, apuntó el inspector ante el titular del juzgado Central de lo Penal de la Audiencia Nacional, José María Vázquez Honrubia. A preguntas de la fiscal Anticorrupción Myriam Segura sobre un acto celebrado en Castelló en 2007, concretó que cobrar parte de los actos de modo ajeno al sistema financiero es «una continuidad de una forma de facturar».

Morocho, que compareció en la vista oral como testigo-perito, señaló que hay constancia desde el año 2002 de que las empresas de la Gürtel elaboraron hojas de coste donde se percibe esa «doble facturación».

En relación a los pagos en «b» de los actos de las campañas de las elecciones municipales y autonómica de 2007 y de las generales de 2008, cuya organización se contrató a la empresa de la Gürtel, y que están siendo analizados en este procedimiento judicial, el inspector añadió que el PP valenciano tenía la «dificultad para aportar esos fondos» y por ello «se opta por una vía ficticia» que se hizo efectiva a través de «terceras sociedades».

De hecho, subrayó que las facturas emitidas por Orange Market a otras empresas «en su plenitud son ficticias» porque no hay pruebas que acrediten que la empresa de Correa realizase servicios a estas constructoras. Los «fondos en 'b'» y los pagos de las mercantiles «descuentan la deuda existente» de la formación política con la Gürtel.

Nueve empresarios acusados en este juicio han reconocido ante la Fiscalía Anticorrupción y ante el juez haber sufragado irregularmente los actos electorales de los populares valencianos.

El inspector también ratificó que las siglas que aparecen en la contabilidad de Orange Market corresponden a políticos «populares» valencianos y empresarios. «VR» sería Vicente Rambla; «RC», correspondería a Ricardo Costa, y «DS» sería David Serra, todos ellos acusados en este juicio. Los tres nombres aparecen en hojas excel o facturas de compras de regalos que hacía Orange Market.