La Guardia Civil investiga el hallazgo de una bebé recién nacida que apareció muerta el pasado viernes a las seis de la tarde en la planta de reciclaje de Reciplasa de Onda, donde tratan la basura 47 municipios de la provincia de Castelló.

Según fuentes consultadas por Levante-EMV, la ligadura del cordón umbilical estaba realizado de manera burda por lo que todo apunta a que el nacimiento se produjo fuera de instalaciones sanitarias, sin atención médica. Al lugar de los hechos acudió una ambulancia, la Policía Local y la Guardia Civil, que investiga las circunstancias del suceso, así como el juez para proceder al levantamiento del cadáver.

El cuerpo fue encontrado por el personal de la empresa en el interior de las instalaciones, donde se clasifican los residuos después de que los camiones viertan la basura a un foso común, lo que en principio supone una complicación averiguar el lugar exacto de donde procede el bebé, cuestión de todas formas está tratando de esclarecer la Guardia Civil.

De momento se desconoce la identidad de los progenitores y los motivos que les llevaron, o le llevaron, a abandonar a su recién nacida.

Sin embargo, fuentes cercanas al caso insisten en el dato de la de ligadura del cordón umbilical como principal punto de partida de la investigación para esclarecer el caso.

La planta de Reciplasa, que tuvo que parar su actividad, continuaba ayer sábado con normalidad. Tanto desde el Ayuntamiento de Onda como desde la empresa rehusaron realizar valoraciones al haber una investigación en marcha.

Estupor de los vecinos

Mientras tanto, el suceso causó una gran conmoción en Onda, y mientras había gente que se preguntaba «cómo es posible que pueda pasar algo así en esta sociedad», otros esperaban que «la madre fuese identificada prontamente por los cuerpos de seguridad».

La incomprensión fue la tónica habitual entre los ondenses, que lamentaban cómo alguien «puede tirar a un bebé a la basura en vez de buscar otras posibilidades, como darla en adopción».

Otros, aprovechando el reciente caso del asesinato de Gabriel, el niño de Almería, aprovechaban para solicitar un endurecimiento de las penas.