El deportista Jorge Rodríguez Cortés concluyó ayer sábado el reto que inició el pasado 21 de marzo para visibilizar la artritis, y llegó a Cádiz tras recorrer en bicicleta los 1.700 kilómetros de la Vía Augusta, que atraviesa el Mediterráneo desde Francia hasta la capital gaditana.

El objetivo de esta iniciativa de la Asociación Valenciana de Afectados de Artritis (AVAAR) era visibilizar esta enfermedad, a veces invisible y muy difícil de entender, incluso para el propio afectado, que lidia con una dolencia «crónica, impredecible y dolorosa».

«No tengo fuerzas para rendirme», aseguró el deportista, quien en los vídeos que ha ido grabando durante el reto confesaba que algunos momentos los ha vivido «muy cuesta arriba» y se veía en la «cuerda floja», aunque siempre junto a otro compañero, Gerard, siguió afrontando las distintas etapas para poder acabar el desafío con éxito.

El reto de la Vía Augusta en bicicleta comenzó hace diez días en Narbona (Francia) y tras recorrer Girona, Tarragona, Tortosa, Sagunt, València, Xàtiva, Córdoba, Dos Hermanas, Utrera, Rota y El Puerto de Santa María, concluyó ayer por la tarde en Cádiz.