La Conselleria de Educación ha sacado a concurso público por 856.537,66 euros (IVA incluido) el servicio de revisión, control y justificación de las solicitudes de becas durante los próximos 24 meses. Esto supone que una empresa privada tratará datos confidenciales de las más de 250.000 familias valencianas que cada curso solicitan la beca de comedor y transporte que convoca la Generalitat así como también de las ayudas anuales al alumnado de Educación Especial y al de Bachillerato y Formación Profesional (FP) que concede el Ministerio de Educación pero tramita el departamento del conseller Vicent Marzà.
Entre los datos personales a los que tendrá acceso la adjudicataria del servicio destacan el grado de discapacidad del alumno solicitante, sus hermanos o padres, «códigos bancarios de la cuenta del cliente», datos académicos, profesión del padre y madre así como su estado civil, NIF...
El pliego de prescripciones técnicas del contrato subraya que el adjudicatario «queda expresamente obligado a mantener a absoluta confidencialidad y reserva sobre cualquier dato que pudiera conocer con ocasión del cumplimiento del contrato, especialmente los datos de carácter personal».
Además, añade que los procesos informáticos «deberán cumplir con lo establecido en materia de seguridad en la Ley Orgánica de Protección de Datos de carácter personal y el Decreto del Consell que aprueba el Reglamento del de Administración Electrónica de la Comunitat Valenciana».
Revisión y verificación
Revisión y verificación
Tras esta licitación está la falta de personal administrativo de la Conselleria de Educación para resolver en cortos periodos de tiempo las citadas convocatorias de becas, que generan un elevado volumen de expedientes.
Solo en becas de comedor Educación ha concedido este curso 118.000 ayudas, un 5,35 % más de beneficiarios que el curso anterior en el que hubo 111.687 becarios. El presupuesto total destinado este curso a becas de comedor alcanza los 68.093.000 euros, por lo que se incrementa en un 6,6 %
El objeto del contrato es la prestación de un servicio de «comprobación de los datos de las solicitudes de becas», según el pliego. En concreto, las tareas que se detallan son: «revisión, cotejo, verificación, codificación, corrección y archivo de expedientes de las solicitudes de becas, de acuerdo con los requisitos establecidos para cada convocatoria».
Educación no fija el número de empleados que ha de contratar la adjudicataria, aunque resalta que la empresa «deberá aportar todo el personal necesario para cumplir con las exigencias del pliego». Este personal privado trabajará en las Direcciones Territoriales de Educación en Alicante, Castelló y València, así como en la sede de la Conselleria de Educación, en la Avenida de Campanar del Cap i Casal. La conselleria pondrá ordenadores y aplicaciones informáticas al servicio de la empresa, que «deberá aportar, como mínimo, 8 ordenadores para su utilización en dichas dependencias».
Fuentes del departamento del conseller Marzà insisten en que esta operación no supone una privatización de la gestión de las becas escolares. En este sentido, el pliego fija que el trabajo «se prestará bajo la supervisión del funcionario o funcionarios responsables y en el horario y fechas que éstos indiquen».
Clasificación y baremación
No obstante el pliego si que alude en varias ocasiones a la «gestión» de las solicitudes. Así, especifica que las peticiones de becas «serán objeto del siguiente tratamiento: serán clasificadas conforme a los criterios que se indiquen por la dirección de los trabajos; serán baremadas conforme a los criterios y procedimientos establecidos en las bases reguladoras, las convocatorias y las instrucciones que al efecto facilitará la dirección de los trabajos». En la cuarta página del pliego de este concurso también consta que «cada Dirección Territorial examinará el trabajo realizado para determinar el número de las becas gestionadas».
El objetivo es hacer frente al alud de solicitudes de becas, por ello tiene «un carácter intermitente, siendo intensivo en los días o meses que indique» la conselleria «por exigencias del calendario establecido en las convocatorias de las becas». Así, Educación prevé que «el número de solicitudes presentadas sea de 250.000 en cada curso, correspondiendo un volumen superior de trabajo durante el periodo comprendido entre los meses de octubre a enero».
