El Bloc Nacionalista Valencià, partido mayoritario de la coalición Compromís, ultima su investigación interna sobre los gastos de la campaña electoral de 2007 que están siendo investigados -junto a los del PSPV de aquel mismo año-, por cuatro juzgados distintos, y que ha servido al PP liderado por Isabel Bonig para poner contra las cuerdas al Ejecutivo autonómico. Según fuentes de la formación nacionalista, el próximo martes, durante la reunión ordinaria que mantendrá la ejecutiva del Bloc ya podría haber, si no conclusiones de dicha investigación, sí un informe preliminar.

En todo caso, el partido prosigue la búsqueda de toda información contable referida a las elecciones de 2007. Según dijo ayer a Levante-EMV la coordinadora nacional de la formación, Àgueda Micó, «seguimos tratando de reunir toda la información, aunque hay que tener en cuenta que es de hace más de 10 años, y en algunos casos está en soportes que ya no utilizamos». De todos modos, Micó volvió a lamentar «la sensación de indefensión» que produce en su partido el hecho de no tener en sus manos ningún auto judicial, con lo que «no podemos saber qué es exactamente lo que tenemos que buscar, lo cual ralentiza el proceso», dijo.

La denuncia que en 2016 presentó el PP contra PSPV y Bloc por supuesta financiación irregular empieza a tener un recorrido judicial inesperado por ambos partidos que añade un punto de incertidumbre a un año de las elecciones autonómicas. El asunto, además, ha sacudido la agenda política valenciana.

«Ruido mediático»

Fuentes del Bloc no ocultan que este caso despierta «cierta preocupación» y aunque, como sostiene el representante de Compromís en Bruselas, Jordi Sebastià, «la base de la presunta irregularidad no tiene sentido», sí que existe cierto temor a que el partido se vea innecesariamente expuesto al «ruido mediático» y emborrone la gestión de una de las patas del Gobierno valenciano.

No obstante, el presidente de las Corts, Enric Morera -que estaba al frente del Bloc en el periodo denunciado-, aseguraba ayer que en el Bloc «hay confianza en la correcta administración del partido» y reiteró que toda la polémica es «una denuncia falsa» del PP.

Para la coordinadora de la formación, el Bloc «no tiene nada que esconder», aunque matizó que «si algo no se hizo bien no nos temblará el pulso a la hora de exigir responsabilidades».

En todo caso, desde el Bloc evitaron ayer cualquier atisbo de fricción con la vicepresidenta del Consell, Monica Oltra, quien el viernes eludió dar un apoyo explícito a Morera, ya que, «la Generalitat no pone ni quita la mano del fuego por nadie». Morera quitó hierro ayer a estas palabras y dijo estar de acuerdo en «no mezclar los ámbitos». Además, reafirmó la «tolerancia cero» de la coalición Compromís con la corrupción y añadió que «una forma de corrupción es hacer una denuncia falsa». También Micó evitó valorar las palabras de Oltra.

Claves de la polémica

Cuatro juzgados de Gandia, Benidorm y Madrid investigan si el PSPV-PSOE y el Bloc (pieza principal del actual Compromís) tuvieron financiación ilegal para la campaña electoral de 2007. Ambas formaciones políticas podrían haber financiado, supuestamente, diversos actos electorales a través de facturación falsa, con cargo a empresas de la construcción.

En esta operativa habría colaborado la empresa de comunicación y marketing de Gandia Crespo Gomar SL, ya extinguida, con una operativa que se asemeja a la que la empresa Orange Market (la sucursal de la Gürtel en València) hizo con el PP de la Comunitat Valenciana.

Crespo Gomar SL hizo la campaña electoral de Joan Ignasi Pla (PSPV-PSOE) en las elecciones autonómicas de 2007 y actos del Bloc, liderado entonces por Enric Morera.