Tres meses después de la primera fase de las primarias internas de Esquerra Unida, el proceso interno llegará a su fin el 28 de abril con la elección de su coordinadora general.
Las asambleas comarcales tendrán hasta ese día para convocar a sus militantes y decidir los delegados correspondientes por territorio. El día 28, los representantes comarcales asistirán ya como integrantes de los 60 miembros del Consell Polític Nacional que, junto a los otros 60 que se elegieron el 25 de febrero, decidirán quién será la nueva lideresa del partido: Rosa Albert o Rosa Pérez Garijo.
Esta elección llega en un momento difícil entre EUPV e Izquierda Unida desde que se impusiera desde Madrid el nuevo censo para las comarcas. EUPV estipuló que serían 65 los representantes comarcales en el Consell Polític Nacional pero IU ordenó que fueran 60, lo que genera cierta incomodidad en las comarcas que han visto reducido el número de delegados que les tocaba.
En la primera vuelta de febrero, hubo un empate a 30 entre la candidatura que encabezaba Rosa Albert y la que lideraba Rosa Pérez. Las asambleas comarcales suponían una esperanza del desempate dado que 65 era un número impar y no podría volver a repetirse el resultado que ha mantenido paralizada a EUPV durante tres meses. Habrá que esperar al 28 de abril para conocer quién liderará el futuro de la formación de cara a las elecciones de 2019.
La primera vuelta de las primarias
Rosa Albert y Rosa Pérez Garijo. Dos listas diferentes, con planteamientos distintos, pero que llaman teóricamente a un mismo fin: integración dentro del partido. El tercer aspirante, el alcalde de Polinyà del Xúquer, Óscar Navarro, retiró su candidatura porque solo obtuvo cuatro votos, que cedió en favor de Albert. Eso provocó el empate con Pérez que mantiene la nueva coordinación del partido en pausa con 60 miembros del Consejo Político Nacional elegidos pero sin un liderazgo claro.
Un resultado igualitario para las dos corrientes que parece que solo se romperá a través de las asambleas comarcales donde se elegirán a los 60 representantes que faltan para completar el consejo. No es la primera crisis que vive Esquerra Unida, pero se trata de una situación «insólita» para Ignacio Blanco, exdiputado en las Corts por Esquerra Unida. Para Ricardo Sixto, hoy diputado en el Congreso, «es un equilibrio precario».
