El peritaje del local de Gandia destinado a la Federación Valenciana de Fútbol, cuya venta se investiga en un juzgado, no se ha pudo realizar en un año.
La jueza, Nieves Molina, pidió el 22 de marzo de 2017 autorización para que un agente inmobiliario de Madrid realizara el peritaje del local, pero pese al tiempo transcurrido el inmueble no fue valorado.
Seis días después de la solicitud, el 28 de marzo de 2017 la Conselleria de Justicia pidió a la jueza que concretara el coste del peritaje del inmueble. Días después, el 7 de abril de 2017, el juzgado contestó que la estimación del coste del peritaje era de unos dos mil euros más IVA. Ese mismo mes, el 19 de abril, la dirección general de Justicia autorizó que con ese presupuesto de dos mil euros se realizara el peritaje y se abonara la cantidad sobre el trabajo realizado, según fuentes de la conselleria.
Sin embargo, la tasación no se realizó desde abril de 2017. Las fuentes señalan que por funcionamiento administrativo no se realizan provisiones de fondos, como pedía la juez, sino que se paga sobre trabajos realizados.
La investigación sobre este inmueble ha saltado a la luz dentro de la investigación abierta por posibles irregularidades en las cuentas electorales de PSPV y Bloc.
La Federación Valenciana de Fútbol lo adquirió por 525.000 euros en una operación subvencionada al 50 % por el Ayuntamiento de Gandia. El inmueble era propiedad de la familia Gomar, que lo vendió finalmente a la Federación Valenciana de Fútbol por casi el doble de lo que le costó. Respecto a esta operación, la jueza indica en su auto de inhibición que «queda pendiente la práctica de la tasación pericial del inmueble y la entrega del expediente administrativo de la subvención».
La jueza de València decidió que un perito de Madrid (hay más de 200 colegiados en la capital según el colegio) el que realizara la tasación del inmueble y lamentó que no se había realizado por falta de provisión de fondos, algo que la conselleria rechaza.
