La dirección del Partido Popular de la Comunitat Valenciana recibió ayer con serenidad las informaciones sobre los actos organizados por Orange Market en los municipios donde gobernaban los actuales mandatarios de la formación y que, según los informes policiales, habrían sido financiados en "B". La tranquilidad, aseguraban fuentes de la dirección, procede de que los actos del PPCV en los municipios los organizaba y pagaba la organización regional, al igual que sucede en la actualidad. Los líderes municipales (como Isabel Bonig en la Vall d'Uixò o José Ciscar en Teulada en 2007) desconocían todo de estas actividades de campaña del PPCV salvo el lugar de realización, de acuerdo con esta explicación. «A partir de ahí, ya dirá la Audiencia Nacional si se pagaron en 'A' o en 'B'», apuntaron a Levante-EMV en el entorno de Bonig. «En todo caso, será responsabilidad de la dirección regional de entonces», agergaron. El secretario general en aquel momento era Ricardo Costa, quien ha reconocido en la Audiencia Nacional que el partido recurrió a prácticas corruptas para financiar sus campañas.

La actual cúpula del PPCV vinculó ayer la aparición de informes de la UDEF que salpican a sus responsables con la investigación judicial por la presunta financiación ilegal de PSPV y Bloc, propiciada por una denuncia interpuesta por el PP ante la Policía: el propio Ciscar llevó la documentación que supuestamente les llegó por un anónimo.

Las fuentes mencionadas hicieron hincapié en que el informe policial sobre los actos del PP en municipios valencianos durante las campañas electorales de 2007 y 2008 «lleva años» en la Audiencia Nacional y en ningún momento Bonig, Císcar o Bastidas han sido llamados a declarar.

No obstante, sí lo han hecho algunos otros de los citados en la documentación, como los exalcaldes de Mislata (Manuel Corredera) y Ontinyent (Lina Insa) que recientemente declararon en Madrid en el juicio por la rama valenciana de Gürtel.

Según las fuentes, la relación (presunta) de la actual presidenta del partido, Isabel Bonig, con Orange Market durante su etapa como alcaldesa de la Vall d'Uixò ya ha sido objeto de informaciones periodísticas sin que las investigaciones hayan ido más allá.