La orografía de la Comunitat Valenciana no siempre lo pone fácil, sobre todo si se trata de acceder por carretera lo antes posible para atender una urgencia. Para la Conselleria de Sanidad en los que, cuando hay un paciente crítico, es más rápido movilizar a los helicópteros medicalizados que llegar con una SAMU por carretera.

Para mejorar la atención sanitaria que se da ahora a los pacientes «críticos» de estas zonas, Sanidad presentó ayer su Plan Remot, gracias al que se formará y dotará de material al personal de la Atención Primaria de estos municipios para poder, al menos, estabilizar a estos pacientes críticos hasta la llegada de las unidades de emergencia.

Se trata de que 134 profesionales (entre médicos y personal de enfermería) de siete Puntos de Atención Continuada (PAC) de la red de atención primaria de estos municipios aprendan a estabilizar a una persona con politraumatismo, por ejemplo, o que sufra un infarto o un ictus.

Los cursos para hacerlo posible ya han comenzado en Castelló y se completarán antes del verano para que entre septiembre y octubre "la atención sanitaria a estas 18.000 personas sea más segura". "Son ciudadanos y ciudadanas que se sentirán menos aislados y más seguros", en palabras de la consellera de Sanidad, Carmen Montón, que ha subrayado la importancia de cualquier iniciativa como esta, destinada a salvar vidas.

La formación no serviría, sin embargo, de nada, sin medios. De esta forma, cada uno de los PAC de estas zonas «remotas» recibirán una mochila de Soporte Vital Avanzado gracias a la que podrán atender al paciente con todos los recursos con los que cuenta una SAMU: monitor-desfibrilador; ventilación mecánica y bala de oxígeno, bomba de perfusión, taladro de canalización intraósea y un kit de inmovilización de pacientes (con tablero espinal, collarín cervical, férulas de inmovilización de miembros y lona porta-heridos, entre otros), todo valorado en 27.000 euros. El material se distribuirá, según anunció ayer la consellera, en junio.

La tercera «pata» del Plan Remot es la coordinación de los profesionales con el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) a través de un procedimiento específico, de modo que la actuación ante una emergencia será conjunta entre los profesionales de Atención Primaria y el Servicio de Emergencias Sanitarias. En algunos casos, se hará a través de «radio digital porque hay zonas que no hay cobertura telefónica», añadió la consellera.