La vicepresidenta de la Generalitat, Monica Oltra, ha valorado las últimas informaciones relacionadas con los pagos en 'B' del PP durante la etapa de Francisco Camps al frente de la Generalitat y a través de Orange Market, la empresa dirigida por Francisco Correa y que, según la información revelada por Levante-EMV, habría salpicado a la actual presidenta del Partido, Isabel Bonig, y al dirigente de la formación en Alicante, José Císcar. Para Oltra, lamentablemente "no supone nada nuevo" porque el PP en la Comunitat Valenciana vive "atrapado en el tiempo, en el día de la marmota".

Para la vicepresidenta, las informaciones diarias del caso revelan "la magnitud de la Gürtel y el desvío constante de dinero público en la Comunitat Valenciana". Además, "la riada de la corrupción se llevó a los exdirigentes, pero la rueda no se ha roto", ha señalado.

Oltra considera que la reflexión que debería hacer el partido es que, si se quiere dar la imagen creíble de que el PP ha superado la corrupción, deberían "hacer un corte" dentro del partido, porque se ha demostrado que los dirigentes actuales "se beneficiaron también en el pasado y han jugado con ventaja".

Podemos "está en su derecho"

La vicepresidenta se ha referido también a las últimas declaraciones desde Podemos que apuntaban a apartar del cargo público a los nombres que aparecen en los documentos del sumario sobre la financiación ilegal del PSPV y el Bloc en 2007. En concreto, afectaría al asesor del presidente Puig y exalcalde de Gandia, José Manuel Orengo.

Oltra ha señalado que la formación morada esta "en todo su derecho", pero ella apuesta por "esperar a que los partidos presenten los informes" con toda la información recopilada.

Además, cree que para llevar a cabo un cese de un cargo, como solicita de forma velada Podemos, "primero hay que establecer un diálogo entre las fuerzas políticas y poner la petición encima de la mesa, valorarla, y establecer conclusiones".

El PP vuelve a Alicante

Tras el pleno del Consell, las preguntas acerca de la nueva situación política en el Ayuntamiento de Alicante han sido inevitables. Como vicepresidenta, Oltra ha querido felicitar al popular Luis Barcala como nuevo alcalde de la ciudad. Sin embargo, respecto a las declaraciones de la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, que aseguró que se trataba de una "reconquista" que continuaría en el norte, en Castelló, hasta llegar a València, Oltra ha restado crédito y ha asegurado que se mueve "en términos constitucionales y no bélicos".

Asimismo, se ha mostrado preocupada por que la ciudadanía "no se vea reflejada" en la nueva alcaldía ostentada por el PP, dado que en 2015 fueron "las fuerzas progresistas" las más votadas. "No me preocupa que la izquierda haya perdido, me preocupa que la sociedad no se identifique con el giro político del ayuntamiento".

Respecto al voto en blanco de la tránsfuga de Podemos, Nerea Belmonte, que se encuentra entre los no adscritos, la vicepresidenta cree que esto supone "una pérdida de credibilidad" cuando una tránsfuga "tiene el poder de cambiar un gobierno en contra de la mayoría social".