La Federación de Sindicatos Independientes de la Enseñanza (FSIE), mayoritaria en la educación concertada, ha reclamado a la Conselleria de Educación que asegure los puestos de trabajo de las escuelas infantiles privadas porque, ha advertido, «están en juego 5.000 empleos». El sindicato insta a Educación a comprometerse con el futuro de los profesionales de las escuelas infantiles y «no dejarlos caer». Afirma que la creación de 14.000 plazas en centros de titularidad pública, municipales y de la conselleria en colegios públicos, pone en riesgo «5.000 puestos de trabajo relacionados directa o indirectamente con estas escuelas».

«El Consell no puede desentenderse ante posible despido masivo de profesionales», señala la FSIE, que considera que la apertura de más aulas en los CEIP y la oferta de gratuidad en la Escuelas Infantiles de gestión directa o indirecta, es «un ataque a los Centros de Educación Infantil de iniciativa social y a la libertad de los padres».

Según el sindicato, los trabajadores de este sector, en su mayoría mujeres, «viven desde hace meses en un clima de inseguridad insostenible». «En el peor de los casos ven peligrar sus puestos de trabajo y en el mejor, temen que se incremente la precariedad de sus contratos», indica el sindicato.