El virrey de la Costera, el hombre que lo fue casi todo en Xàtiva, se declara «completamente insolvente» ante el juez. Alfonso Rus batalla desde el 23 de febrero de 2017 para que el Juzgado de Instrucción 18 de València y la Fiscalía Anticorrupción liberen la mayoría de sus propiedades embargadas por obra y gracia del Caso Taula. En enero insistió y tres meses después de reclamar que se le devuelvan la mayoría de sus propiedades, Rus vuelve a la carga para reclamar al juzgado que libere la veintena de propiedades que tiene inmovilizadas desde hace dos años.
Tras ser detenido el 26 de enero de 2016, por su supuesta implicación en la red de cobro de presuntas mordidas en la Generalitat y la Diputación de València y un supuesto blanqueo de capitales con ramificaciones en el extranjero, el magistrado del Caso Taula, Víctor Gómez Saval, dejó en libertad a todos los detenidos por el Caso Taula, aunque les impuso fianzas millonarias para garantizar una posible responsabilidad civil en caso de una eventual condena. A Rus y su vicepresidente económico, Máximo Caturla, se les impuso dos millones de euros de fianza y un millón para otros dos de sus lugartenientes: Juan José Medina y Emilio Llopis.
Una fianza que se materializó en forma de auto el 10 de febrero de 2016 «en la que el instructor decidió la intervención, a efectos de posible decomiso, de 29 propiedades participadas» por Alfonso Rus «con un valor global muy superior al de la fianza impuesta».
La defensa del exalcalde de Xàtiva contratacó y ofreció, mediante un escrito presentado el 20 de febrero de 2016, cuatro bienes cuyo valor «acreditado mediante tasación, resultaba suficiente para garantizar la fianza impuesta»: un edificio comercial valorado en 3 millones de euros (aunque Rus sólo es propietario del 50%), dos naves industriales valoradas en 466.081 euros y dos plazas de garaje (tasadas en 40.000 euros), todas inscritas en el Registro de la propiedad de Xàtiva.
Dos años después, las veintinueve propiedades siguen embargadas por el juzgado. Y Rus se confiesa «completamente insolvente», con sus empresas cerradas y con «el cien por cien de sus propiedades trabadas». Una situación «desproporcionada» a juicio del letrado que defiende a Alfonso Rus en el Caso Taula, Emilio Pérez Mora. De ahí que hayan vuelto a solicitar que se levante el embargo sobre 24 de las 29 propiedades embargadas porque, como justifican en su nuevo escrito, la mayoría fueron adquiridas antes de que Alfonso Rus entrara en política (como alcalde de Xàtiva en 1995) y fueron adquiridas por él o recibidas en herencia, según el nuevo escrito presentado por su defensa ante el Juzgado de Instrucción 18. No es la primera vez que Rus verbaliza este argumento. «Yo ya era rico antes de entrar en política. Con 30 años tenía un Porsche, con 35 un Ferrari y un Mercedes».
El exalcalde de Xàtiva también reclama al juzgado que le devuelva un mercedes de «uso exclusivo» de su mujer para «salvaguardar el valor del bien».
