Con 18 años, la diputada de Compromís Marian Campello fue a hacer una prueba para un trabajo. Se tenía que quedar a dormir. "El que ejercía de coordinador y tenía que dar el visto bueno a mi faena, casi me doblaba la edad, sin darle ningún consentimiento se metió en mi cama. Recuerdo mi parálisis". Es el relato de su experiencia personal de abusos sexuales que la parlamentaria en Corts ha compartido esta mañana en su cuenta en Twitter.
La confesión se produce horas después de que una compañera de partido, Isabel Lozano, concejala de Igualdad en el Ayuntamiento de València, destapara el pasado lunes su caso: una experiencia cuando tenía 10 años con un monitor de karate.
Las dos políticas valencianas se han sumado a la campaña "Cuéntalo", que busca sacar de la oscuridad a las víctimas de abusos sexuales. La iniciativa ha desatado una ola de movilización en redes sociales después de la sentencia de la Audiencia de Navarra por el caso de La Manada.
Campello ya desveló en la tribuna de las Corts en enero de 2016 que había sido víctima de acoso escolar. Contó que cuando tenía 12 años intercedió a favor de otra chica que estaba siendo maltratada y que, a partir de ese momento, el objetivo de la agresora fue ella. Entonces aún no se utilizaba la palabra "bullying", pero sus padres tuvieron que intervenir.
un día vio cómo se estaba maltratando a otra chica, intercedió y a partir de ahí la agresora fue contra ella. "Desperté a la bestia", ha recordado. Entonces tenía 12 años y el 'bullying', ha dicho, "no tenía nombre" y no existían las medidas actuales, porque "nadie pensaba que eso podía pasar". Además, ha continuado, "era una niña que no tenía ninguna diferencia aparente, ni era homosexual ni gordita, ni inmigrante", y le decían que la acosadora tenía "una vida complicada" mientras el grupo "no reaccionaba" y se volvía "ciego y mudo".
