El expresidente de la Generalitat, Alberto Fabra, acaba de explicar en la comisión de investigación de las Corts que «mi directriz a los consellers fue que no nos costara dinero Feria València». Fabra ha sacado pecho durante su comparecencia de las decisiones que adoptó para reducir los costes en Feria València. «En 2011 vivimos una situación muy complicada, que se puede calificar de tormenta perfecta» por lo que «las circunstancias nos obligaron a ser muy rigurosos en el gasto público». De ahí que decidiera, explicó, «encargar un control financiero de todas las instituciones públicas o que recibieran dinero público» por lo que se hicieron auditorías «de las instituciones que los técnicos consideraron». Uno de estos informes se refería a Feria València, en el que se detectaron sobrecostes que rondaban los mil millones de euros. «Ese informe se envió a la Fiscalía, que finalmente decidió que no existía responsabilidad penal, así que ahora su trabajo es poner en valor la inversión hecha en Feria València», ha reclamado.

Al exjefe del Consell también se le ha preguntado en la comisión de investigación que investiga los sobrecostes y las supuestas irregularidades en la gestión del recinto ferial, sobre la factura de casi 600.000 euros del Congreso del PP en 2008 que aupó a Mariano Rajoy a la presidencia nacional del PP, pero que no se pagó hasta 2017 por orden judicial. «Sí era consciente de que había discrepancias entre el PP regional y nacional, según me trasladó el secretario general del PP [Serafín Castellano en aquel momento]». Las discrepancias consistían en que nadie quería asumir el pago de la factura del Congreso Nacional del PP. «El secretario general me trasladó que esa factura debía asumirla la dirección nacional porque era un congreso nacional». Una tesis que finalmente fructificó como ha recordado Fabra: «No será la única factura que se ha pagado a una entidad a través de un juzgado. Y la ha pagado la dirección nacional [del PP], que era la postura que defendía el Partido Popular de la Comunitat Valenciana».

El expresidente también negó que le constaran resistencias internas al informe de control financiero sobre la Feria, cuyo patronato estaba presidido por la entonces alcaldesa de València, Rita Barberá. "Cada uno ejercía su responsabilidad", ha argumentado el expresidente de la Generalitat. Acto seguido, el exjefe del Consell se ha preguntado en voz alta si en los tres años que han transcurrido desde que dejó la presidencia "se han modificado los estatutos y se han adoptado los cambios para lograr la eficiencia de la entidad. Estoy convencido de que los gestores que había en su día hicieron lo mejor", ha defendido Fabra.

Ha insistido en que, cuando llegó a la Generalitat, "no estaba para pensar en lo que había ocurrido hacía quince años", como las obras de Feria Valencia, ni para "mirar por el retrovisor", sino para la gestión del momento y para evitar que la Administración valenciana hiciera "un 'default'", en alusión a una posible suspensión de pagos.