El Síndic de Greuges de la Comunitat Valenciana es partidario de que la Sanidad pública financie el coste de los tratamientos de reproducción humana en casos de estirilidad secundaria, es decir cuando la imposibilidad se produce para gestar un segundo hijo.

Para ello, el alto comisionado de las Corts para la defensa de los derechos de la ciudadanía, José Cholbi, ha realizado una sugerencia a la Conselleria de Sanidad, a la que solicita que valore la incorporación a su cartera de servicios de los casos de esterilidad secundaria.

La resolución ya ha llegado al departamento que dirige Carmen Montón, pero fuentes de la conselleria señalan que se priorizan los casos en que los tratamientos de reproducción son para gestar el primer hijo (procedimientos que están sometidos a listas de espera) y recuerdan que a la llegada del Botànic al Consell se levantó el veto que impedía a mujeres lesbianas someterse a tratamientos para facilitar la gestación en la sanidad pública.

Además, el Síndic de Greuges recuerda a la conselleria la necesidad de dotar de medios materiales y personales para atender la alta demanda existente en las técnicas de reproducción asistida.

La petición del Síndic de Greuges se produce a partir de una queja recibida por parte de una valenciana con pareja femenina que ya tiene una hija, gestada por su pareja con semen de un donante anónimo. Pero como no es madre biológica, la mujer pide que la Sanidad pública le financie el tratamiento de fertilidad. Sin embargo, el departamento que dirige Carmen Montón responde que ya es madre y que en los tratamientos se da prioridad al primer descendiente, que en su caso ya es la hija de la mujer con la que está casada.

Sanidad rechazó su expediente

De hecho, cuando la autora de la queja fue derivada por la ginecóloga del centro de especialidades de Juan Llorens de València a la unidad de reproducción del Hospital General para tratar su problema de infertilidad (tras tres intentos infructuosos en la privada), el hospital rechazó la apertura del expediente alegando que ya tiene una hija de su pareja.

Sin embargo, la mujer pidió al Síndic de Greuges que ante la negativa del hospital valorara la situación. Aduce que las mujeres lesbianas y solteras ya están de nuevo incluidas en estas técnicas (desde la llegada de Montón a la conselleria) y que, además, todas las mujeres con problemas de fertilidad (como sería su caso) siempre han estado incluidas en los servicios de la sanidad pública.

Sin embargo, la Dirección General de Investigación, Innovación, Tecnología y Calidad respondió al Síndic que al tener ya un hijo como pareja no se le puede realizar ningún otro tratamiento en el sistema público, porque la cartera de servicios incluye la realización de la técnica de reproducción asistida a mujeres solas o parejas sin ningún hijo común previo sano, que no es el caso de la solicitante.

Añade que para someterla a tratamiento sería necesario cambiar los decretos por los que se establece la cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de Salud.

Con todo, la Administración sanitaria valenciana traslada al Síndic el inicio de conversaciones en el seno de la conselleria para atender situaciones como las descritas por la promotora de la queja, lo que ha permitido abrir el debate sobre la financiación pública para la gestación del segundo hijo.