El conseller de Educación, Vicent Marzà, cargó en la tarde de ayer en las Corts la campaña por la que el PP anima a los padres en su web a denunciar de forma anónima el adoctrinamiento en las aulas por parte del profesorado de la enseñanza pública que imparte sus clases en valenciano.

"Es indecente y una vergüenza la campaña que está haciendo contra el profesorado", soltó Marzà a la portavoz de Educación del PP, Beatriz Gascó, que le acababa de exigir la retirada de la Ley de enseñanza plurilingüe que comenzará a aplicarse el próximo curso.

"En los centros educativos no se adoctrina, se educa en libertad para que los niños y las niñas sean libres y críticos con cualquier ideología", añadió el conseller. Marzà, mientras mostraba un DVD de la película "La lengua de las mariposas", exigía al PP que "deje a los maestros educar en libertad". En este largometraje un maestro republicano gallego es fusilado por falangistas durante la Guerra Civil tras ser denunciado por "rojo".

El conseller, tras bajarse de la tribuna de oradores, le regaló a Gascó la película, dirigida en 1999 por José Luis Cuerda e interpretada por Fernando Fernán Gómez en el papel del maestro. La diputada popular ni siquiera tocó el DVD cuando Marzà se lo dejó en la mesa de su escaño.

Los directores de instituto consideran "intimidatoria" la campaña del PP

La Asociación de Directores de Institutos de Educación Secundaria (Adies-PV), a través de un comunicado, también ha mostrado su "más enérgica repulsa hacia la temeraria e intimidatoria" campaña del PP valenciano. "Denunciamos esta práctica persecutoria e inquisitorial que pretende normalizar el PP con esta insólita y extemporánea iniciativa", añaden.

"Intentar judicializar la práctica docente, solo fomenta la división social, la desconfianza hacia las instituciones públicas y el menosprecio más miserable de las más básicas reglas de convivencia", concluyen los directores.

Gascó exige la retirada de la Ley de enseñanza plurilingüe

Gascó, urgió a Marzà a "cumplir la sentencia sobre el chantaje lingüístico y retirar la ley para que las familias recuperen los derechos que nunca deberían haber perdido". Además exigió al conseller que "asuma su responsabilidad por llevar tres normas lingüísticas en un año, por vulnerar la ley, no cumplir las resoluciones judiciales e intentar implantar un modelo de enseñanza único".

La diputada popular ha manifestado que "nada de lo que está ocurriendo en la educación valenciana es normal porque la ley aprobada hace dos meses contiene artículos que han sido anulados por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunitat Valenciana. Lo normal sería que derogaran la ley, escucharan a las familias y dejaran de utilizar a las escuelas y a los alumnos como sedes políticas".

Gascó ha indicado que "ha sido el TSJ quien ha dicho a Marzà que quería arrinconar el castellano y arrebatar la libertad a las familias. Mantener la inmersión lingüística es una actitud antisistema, impropia del poder público que puede llevar a incurrir en desacato".

La representante popular ha señalado que "los artículos que suprime el TSJ se repiten literalmente en la ley que acaban de aprobar. ¿Cómo no se iba a abrir una comisión bilateral ante una ley que es un churro sectario?" se ha preguntado.

"Los escolares van a estudiar más inglés que nunca", replica Marzà

El conseller acusó al PP de "estar en contra de que los niños y niñas aprendan lenguas", y subrayó que con la nueva ley todos los colegios "van a dar más clases en inglés que cuando gobernaba el PP en la Generalitat".

Marzà descarta que con la ley de plurilingüismo "la enseñanza en castellano esté arrinconada en el sistema educativo valenciano, pues todos los colegios darán como mínimo un 25 % de clases en castellano como dicen todas las sentencias del Tribunal Supremo".

"Queremos que los escolares dominen el valenciano, que no sabemos si es lo que quiere el PP, y que estudien más inglés que nunca", subrayó el conseller.

Respecto a la comisión bilateral convocada por el Ministerio de Educación, paso previó a un recurso al Constitucional si no hay acuerdo entre el Consell y Gobierno, Marzà insiste en que "el único pero" que ha puesto Madrid a la ley es el artículo 11 en el que se dice que la conselleria promoverá que los centros aumenten la enseñanza impartida en valenciano. "Promover no es imponer, sino acompañar, y eso es lo que dice el Estatut y la Lleí d´Ús i Ensenyament del Valencià", destacó.

Respecto a la imposición a las familias, Marzà, recordó que el 97 % de los colegios ha aprobado su Proyecto Lingüístico de Centro (PLC) por mayoría de dos tercios, por lo que reprochó a Gascó "no respetar la democracia y normalidad de los centros educativos".