La Policía Nacional, los Mossos d'Esquadra y la Policía de Rumanía, en colaboración con Europol y Eurojust, han desmantelado una «multinacional del fraude» que presuntamente estafó más de ocho millones de euros mediante técnicas de ingeniería social y cuyo principal responsable estaba afincado en València.

En la operación, desarrollada en España y Rumanía, se arrestaron ayer un total de 33 personas . Según informaron los tres cuerpos policiales en un comunicado conjunto, la organización, dirigida desde Rumanía, operaba con distintas células repartidas en toda Europa que se dedicaban a estafas masivas, de manera que si una caía, no dañaba la actividad delictiva del resto de estructuras.

Las estafas eran de dos tipos: a entidades públicas como hospitales, ayuntamientos y consorcios suplantando la identidad de sus proveedores para recibir algún pago pendiente en cuentas abiertas por testaferros, y a particulares con estafas en portales de compraventa inmobiliaria, suplantando páginas web reales o haciendo «phising» bancario.

El detenido en València controlaba los diferentes estratos de la organización y el flujo de dinero, y en el registro de su domicilio se desmanteló un sofisticado taller de falsificación de documentos.

La organización contaba con departamentos de informática, falsificación de documentos y logística, y algunos de sus miembros se dedicaban al blanqueo de dinero. En España contaban con 700 cuentas bancarias.