Que la crisis del coronavirus sea una oportunidad para establecer nuevas rutinas de trabajo también en los centros de salud y que las consultas telefónicas, la posibilidad de hacer teletrabajo desde casa o la telemedicina hayan venido para quedarse y no solo durante los próximos meses de desescalada. Esa es la demanda que la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria (Svmfyc) ha hecho a la Conselleria de Sanidad. «Queremos mantener rutinas que se han tenido que aplicar por el coronavirus. Que la crisis sea una oportunidad porque no queremos dar ni un paso atrás», defiende María Ángeles Medina, presidenta de la sociedad científica. Así, en estas últimas semanas, los centros de salud han sido casi terreno vedado para los pacientes. A los más vulnerables fue a los primeros que se pidió que no se acercaran, después llegó la extensión de tratamientos farmacológicos a los pacientes crónicos para evitar esas visitas para renovar recetas y se ha implantado la consulta telefónica de forma mayoritaria para los casos covid-19 leves, pero también para los que no lo son.

De esta experiencia, desde la sociedad científica reclaman quedarse con la parte buena que supone pasar consulta por teléfono. «No en todos se pueden pero hay en muchos casos que sí y, además, estamos recibiendo una respuesta muy buena por parte de los pacientes», explica Medina. Sanidad anunció antes de la llegada de la pandemia que la Primaria iba a abrazar esta forma de trabajo pero a principios de año su uso no se había generalizado.

Sin acceso remoto desde casa

Los médicos de Familia reclaman, además, poder teletrabajar desde sus casas, algo que se ha visto necesario en esta crisis pero que ha sido imposible porque no hay acceso remoto al sistema de información Abucasis, la plataforma que usa la Conselleria de Sanidad y donde está colgado el historial clínico y las pruebas y proponen dar más peso a la telemedicina que ya se utiliza con éxito en consultas de dermatología cuando hay una sospecha de cáncer de piel, por ejemplo.