Hace justo un año las mayores preocupaciones en materia sanitaria anticovid en la Comunitat Valenciana eran, entre otras, haber perdido la trazabilidad de los contagios y los brotes masivos entre jóvenes no vacunados tras los viajes de fin de curso. Hoy ni siquiera le damos importancia a estas dos cuestiones, por un lado porque la mayoría de positivos ni siquiera son contabilizados –al presentar síntomas leves o no requerir de baja médica– y por otro, porque contamos con la alta vacunación de todas las franjas de edad. Sin embargo, la situación de presión asistencial en los centros hospitalarios es mucho peor a día de hoy que a comienzos de julio de 2021. De hecho, la cifra de hospitalizados de un año a otro se ha multiplicado por seis y esta séptima ola aprieta con fuerza a la par que el sol del verano.

Con la sombrilla que nos da la vacunación y los anticuerpos desarrollados, pero sin el protector solar que ofrecían las medidas restrictivas, este covid abrasador de la nueva ola veraniega amenaza con disparar todavía más los contagios pero con una incidencia de casos graves menor. Así lo demuestra la comparativa entre los datos del pasado 1 julio y del año anterior. Frente a las 151 personas hospitalizadas por coronavirus en la Comunitat a 1 de julio de 2021, se ha pasado a cerca de mil hospitalizados, concretamente 993, según las últimas cifras facilitadas por la Conselleria de Sanidad. Lo que supone 6,5 veces más que en julio del pasado año.

No obstante, pese a este incremento del número de hospitalizaciones por covid, la gravedad de los casos es menor. Si bien hay 42 personas en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de la Comunitat, frente a los 17 casos que había a 1 de julio de 2021, teniendo en cuenta el número total de ingresados las cifras son mejores, ya que solo el 3,68 % acaba en UCI ahora, mientras que el pasado año suponían el 11,26 % de los hospitalizados.

También hay otro aspecto positivo en este sentido y es que la Comunitat Valenciana es la segunda autonomía con menor incidencia acumulada en mayores de 60 años con 715 de IA en los últimos 14 días, solo por detrás de Andalucía.

Ante este aumento de los contagios y del cerca del millar de hospitalizaciones por covid-19, el president de la Generalitat, Ximo Puig, hizo ayer un llamamiento a la «prudencia» y a la «corresponsabilidad» durante el acto del Centenario de la Agrupación Socialista de Quart de Poblet. «Hemos de volver a ser más prudentes», remarcó, e insistir en que en todos los momentos en los que no haya ventilación o haya aglomeración en interiores «es muy aconsejable la mascarilla ya que la pandemia, a pesar de que la estamos superando, no ha pasado», puntualizó Puig.

Sobre la situación de los hospitales valencianos, el president indicó que los datos «son de aumento» aunque estamos muy lejos de las cifras de las anteriores olas, en la que había una situación preocupante. Ahora bien, insistió en que «a medida que aumentan los contagios aumentan también las hospitalizaciones» y las personas que tienen que ocupar las UCI. «Teniendo en cuenta que estamos en el verano, que es un momento en el que hay un descanso merecido de los profesionales que llevan mucho tiempo agotados, la corresponsabilidad es fundamental», añadió el presidente de la Generalitat.

Por su parte, Salvador Peiró, investigador de la Fundación de Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat (Fisabio), considera que aunque se está produciendo un incremento de casos de covid, debido especialmente a las nuevas variantes de ómicron, no parece que la situación requiera la vuelta de medidas restrictivas, como límite en aforos o el uso de mascarilla en interiores.

Esta nueva ola considera que no tiene «nada que ver con las anteriores porque nos pilla con mucha experiencia con el virus», asegura el epidemiólogo. «En las próximas semanas espero un incremento de casos pero no un drama. No lo veo especialmente como para que nos obligue a parar el mundo», apunta a la vez que adelanta que será una ola «rápida que no dure mucho más de un mes. Y aunque no es partidario de la vuelta de medidas restrictivas, sí que «se debería tener cabeza y, por ejemplo, que los contactos de los positivos redujeran su interacción con otras persona», aclara este doctor en Medicina Preventiva y Salud Pública.

Una sola ambulancia del SAMU 24 horas con médico para toda València

La falta de personal médico en las unidades de SAMU de la provincia de València es límite y, a la espera de que se refuercen las plantillas con los 24 médicos y 62 enfermeros prometidos por la Conselleria de Sanidad, se están dando situaciones «muy complicadas», según califican fuentes del sector afectado. Sin ir más lejos entre el viernes y el próximo lunes hay siete ambulancias SAMU de la provincia de València que no cuentan con médico.

En el caso de la ciudad de València el lunes solo uno de los cuatro SAMU con servicio 24 horas tiene médico, el Alfa 3 del Hospital La Fe. El resto, las unidades del Hospital General, de la Malva-rosa y de Manises tendrán que hacer frente a los servicios que surjan con el apoyo de las unidades de doce horas –que por la noche no están operativas– y con personal facultativo de los centros de salud, con el retraso en los servicios urgentes que ello supone.

El sindicato CSIF ya denunció hace unos meses esta situación, pero con la llegada del verano, el incremento de los contagios y las bajas del personal todavía se ha agravado más el problema. Hasta tal punto llega la falta de personal que a los contagiados por covid se les está obligando a ir a trabajar pese a seguir presentando síntomas. A todo ello se suma un problema de fondo, los médicos prefieren trabajar en hospitalización y en atención primaria a la inestabilidad de las emergencias por un mismo sueldo.