Aitana García, Llíber

En la operación policial Ambar se detuvo a cinco personas, dos mujeres en el centro de Llíber, entre las que figuraba la cabecilla del colectivo, un matrimonio valenciano que residía en Xaló y otra mujer en Xàbia. A todas ellas se les imputan delitos de estafa, asociación ilícita y un delito contra la salud pública.

El centro Amba ofrecía diferentes cursos para el aprendizaje de técnicas sobre el desarrollo espiritual y de autoestima. Entre ellos figuraban por ejemplo una técnica para encontrar al niño que llevas dentro o diversas técnicas de relajación y meditación según explicó uno de los alumnos que había participado en las instrucciones. En el momento de la intervención policial 15 alumnos estaban recibiendo un curso avanzado de Reiki, una terapia asiática complementaria a la medicina tradicional cuyo objetivo es potenciar el equilibrio de la energía vital a través de la imposición de manos.

Cursos de 80 euros como tapadera

Los cursos, por los que los alumnos debían pagar entre 70 y 80 euros, eran la tapadera que utilizaba la líder para captar a sus discípulos. Una vez habían recibido varias de las clases ya formaban parte del grupo y por tanto debían de realizar aportaciones monetarias. Fuentes cercanas a la investigación explicaron que mucha gente había dejado la secta por cuestiones económicas.

De hecho, la subdelegación del Gobierno advirtió de que fue la denuncia de dos clientes de Amba la que propició la detención de los cinco integrantes de la secta. Al parecer los dos afectados habían presentado secuelas psicológicas tras recibir la terapia energética del centro de Llíber por la que habían pagado. En este sentido, durante la operación la Guardia Civil interceptó una suma considerable de dinero en metálico. A pesar de esto, varias fuentes consultadas aseguraron estar satisfechos con la terapia recibida en el centro. Los miembros de la secta cambiaban sus nombres por apodos hindúes e incluso varios de ellos se habían trasladado hasta la India para recibir el bautismo en agua sagrada. Viguti es el complementario hindú que utilizaba la líder entre sus adeptos. Deva e Icharo son otros de los nombres que utilizaban integrantes del movimiento.

Al parecer los miembros de la secta eran seguidores de Osho un líder espiritual hindú que tiene discípulos en todo el mundo. Fuentes cercanas al centro Amba explicaron que la líder del grupo había aprendido las enseñanzas directamente de Osho en India y que había alcanzado el estado de «iluminación». Además precisaron que sus seguidores sentían hacia ella una gran devoción.

«La nave»

El centro de Amba de Llíber en el que se detuvo a la líder era conocido por los miembros de la congregación como «la nave». Además de este centro, la secta disponía de otra residencia en la localidad de Xàbia que era utilizada como vivienda por los principales cabecillas de la congregación.

Por su parte, la Guardia Civil no prevé más detenciones en la operación a la que ha denominado «Ámbar». Los cinco detenidos serán trasladados durante la jornada de hoy al juzgado de instrucción número 6 de Dénia, encargado del caso y que ha decretado secreto de sumario.