Pilar G. del Burgo, Valencia

Un hombre de 56 años permanece ingresado desde el pasado domingo en el hospital Clínico en estado grave tras haber sufrido un golpe de calor mientras trabajaba en una obra de la construcción en la ciudad de Valencia, según informó ayer el conseller de Sanidad, Rafael Blasco.

El responsable sanitario indicó que el paciente, «está recibiendo el tratamiento médico adecuado y ha mejorado sensiblemente desde que ingresó, aunque todavía permanece en situación grave». El titular de Sanidad expresó que, «a día de hoy -por ayer-, ninguna persona en la Comunidad ha fallecido como consecuencia de un golpe de calor, porque continuamos sin hablar de ola de calor, aunque hace mucho calor, pero no hay que lamentar ninguna desgracia personal en grado de fallecimiento». En cuanto a la muerte, el pasado viernes de un anciano de 71 años en la terraza de su casa en la calle Castán Tobeñas de Valencia, tal y como publicó Levante-EMV en exclusiva, y de un indigente el domingo mientras dormía en un banco, Blasco manifestó que será la autopsia la que determine si el calor fue causó ambos fallecimientos.

Sanidad mantiene la alerta

La Conselleria de Sanidad mantiene el nivel naranja de alerta -alto- ante la previsión de llegar a temperaturas de hasta 38º en Xàtiva y poblaciones de la comarca de La Costera.

Respecto a los cuarenta ancianos procedentes de diferentes residencias privadas de la comarca del Camp del Túria que fueron atendidas el martes en la puerta de urgencias del hospital Arnau con alteraciones ocasionadas por el calor, tal y como publicó este periódico en exclusiva, el conseller declaró que, «se trata de un colectivo especial que es atendido y esperamos que se pueda recuperar».

Deshidrataciones de ancianos

Por otra parte, fuentes del hospital Doctor Peset informaron a este rotativo que a diario llegan a urgencias entre uno y dos ancianos de residencias de tercera edad con cuadros leves de deshidratación.

La Generalitat Valenciana activó ayer el protocolo de actuaciones preventivas en las residencias de tercera edad, una decisión que adopta el mismo día que este periódico dio a conocer el elevado numero de casos de ancianos que son atendidos en las puertas de urgencias hospitalarias.

Fuentes de la Generalitat informaron que en los centros de tercera edad se ha aumentado un cien por cien el consumo habitual de agua, frutas y verduras para evitar la deshidratación.

La consellera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, explicó que con estas medidas se pretende, «prevenir, minimizar y atender los efectos para la salud derivados de las altas temperaturas que se registran en la Comunitat». Las personas mayores de 65 años, especialmente los muy mayores, los ancianos dependientes con problemas de movilidad y los encamados constituyen un grupo de alto riesgo cuando el calor se dispara.

Desde la asociación empresarial de residencias de tercera edad, que engloba a 162 centros privados que acogen a 14.100 mayores, la gerente María José Cabezón expresó: «Hemos adoptado todas las medidas necesarias, a sabiendas de que el calor es preocupante».

Respecto a la cantidad de personas que han requerido ser atendidas en urgencias como consecuencia del calor, la portavoz declaró que se han llevado, «las que hayan sido necesarias», y aunque indicó que no se ha registrado un aumento de casos, también reseñó que durante estas fechas los ingresos hospitalarios crecen un 25%, aunque aclaró que no se trata de un dato propio de la asociación.