Sol Giménez, Alicante

Las líneas de cercanías de la provincia de Alicante carecen de sistemas básicos de seguridad, según los datos de que dispone la Conselleria de Infraestructuras. La línea Elx-Murcia, vía única sin electrificar, no dispone del sistema de frenado automático (ASFA) ni de comunicaciones tren-tierra ni de bloqueo automático, de manera que sólo se puede utilizar el bloqueo telefónico en este tramo.

En una situación similar se encuentra la línea Xàtiva-Alcoi, si bien, y tras años de reivindicaciones vecinales, el Ministerio de Fomento acaba de adjudicar la redacción del proyecto de mejora de 48 kilómetros de esta línea cuyas obras podrían comenzar el año que viene. Estas dos infraestructuras no son las únicas de la Comunitat Valenciana. Lo mismo ocurre en las conexiones Valencia-Cuenca -a partir de Buñol- y Sagunt-Teruel desde Caudiel. Éstas incluídas dentro de la media distancia.

Todas estas líneas, sean cercanías o media distancia, dependen de Madrid aunque el PP ya ha solicitado su transferencia siguiendo la estela de las que ya gestiona Ferrocarrils de la Generalitat (FGV).

Enmarcados en el capítulo de la seguridad se encuentran también los pasos a nivel. En abril de 2003 Fomento y la entonces Conselleria de Obras Públicas firmaron un acuerdo para suprimir un total de 26. Según el convenio, doce de estas eliminaciones las asumía el ministerio y las otras 14 la Generalitat. Pasado el ecuador de este pacto, Fomento sólo ha hecho desaparecer dos, ambos en la provincia de Alicante. Uno de ellos se encontraba en Elx y otro en Monforte del Cid, de las líneas Alicante-Alquerías y Madrid-Alicante, respectivamente. También suprimieron otro en Orihuela, pero fuera del citado acuerdo y en esta población queda otro pendiente al igual que en Elx y en Monforte, a los que habría que sumar uno más en Novelda por lo que respecta a Alicante. En Valencia, quedan pendientes seis de las líneas La Encina-Valencia y Silla-Cullera-Gandia. La Conselleria de Infraestructuras ha suprimido seis durante el mismo periodo, todos ellos en Valencia. A pesar de los reiterados anuncios de acabar paulatinamente con estos elementos, considerados peligrosos tanto para vehículos como para los propios convoyes, lo cierto es que el Gobierno ha reducido la inversión para ejecutar estas actuaciones en los presupuestos previstos para este año de 10 a 8 millones de euros.

Por otra parte, la línea Valencia-Teruel quedó restablecida al tráfico desde la media tarde del sábado, después de que un mercancías descarrilara en Jérica y afectara y afectara a 700 metros de vías. Alas 18.45 horas del sábado partió el primer tren de media distancia Valencia-Teruel y a las 19.25 el primer cercanías. Unas 120 personas tuvieron que ser transbordadas en este tramo por carretera en autobús, mientras estuvo la vía cortada durante el día, según informaron fuentes de Renfe.