Levante-EMV, Castelló Nadie se acordó de la extraña furgoneta hasta que la explosión puso en jaque al pueblo y, pasadas las 19 horas del domingo, el ex concejal Francesc Adell recibió una llamada del alcalde para advertirle de que había fuego en su finca. Adell es el propietario de terreno donde explosionó el artefacto y se personó en el lugar de los hechos casi al tiempo que el helicóptero de los bomberos y que la Guardia Civil. «Me llamaron por teléfono para decirme que mi finca se estaba quemando. Luego vimos las piezas de motor y nos dimos cuenta de que no se trataba sólo de un incendio normal» .

Tal como relató el dueño del terreno afectado, la explosión generó un cráter que arrasó parte del arbolado cultivado en la finca. «Cuando llegué vi que 8 o 9 oliveras habían sido arrancadas de raíz, y otras 13 afectadas o quemadas, y había un agujero profundo donde antes estaba aparcada la furgoneta» . Francesc Adell también explicó que un representante del estado tomó nota de los daños de la masía y del terreno (una ventana, un cristal y 22 oliveras, nueve de ellas arrancadas de raíz) para elaborar el presupuesto de la correspondiente indemnización a cargo del Estado.