El Ministerio Fiscal ha trasladado al Tribunal de Cuentas las presuntas irregularidades y deficiencias halladas por el Síndic de Comptes tras analizar las cuentas del presupuesto de 2014 de Riba-roja de Túria elaborado y ejecutado por el anterior gobierno del PP, según informaron fuentes de la actual ejecutiva local. En una primera investigación, el Síndic habría descubierto indicios de posible responsabilidad contable, de los que ahora el Tribunal de Cuentas se encargará de determinar si hay responsabilidad contable por parte de los dirigentes populares.

Al parecer, las presuntas irregularidades se encontrarían en la concesión de una subvención de 32.000 euros al Ribarroja Club de Fútbol, en la que se habría incumplido la ley procedimental para concederla y no habría sido justificada correctamente por el club. En concreto, el Síndic hace referencia a un certificado de 12.227 euros expedido por el secretario del club que «no reúne los requisitos del artículo 30 de la ley general de subvenciones, por lo que no debió admitirse en el ayuntamiento».

Por su parte, la actual portavoz del PP, María José Ruiz, que formaba parte de la junta de gobierno del período en cuestión, señaló a Levante-EMV que a su formación no le consta que se haya llevado nada a la Fiscalía y añadió que «lo que decía el informe del Síndic es que la subvención no debía haber sido nominativa, pero el actual alcalde, Robert Raga, ha empleado el mismo procedimiento con alrededor de 20.000 euros de subvención con el mismo club». «Si conocía el informe del Síndic, ¿por qué ha hecho lo mismo?», lanzó Ruiz.