La localidad de Serra volvió a engalanarse ayer, después de 48 años ininterrumpidos, para celebrar el Dia de la Cirera. Un homenaje al producto más típico de la localidad: la cereza. Una celebración que es una oportunidad para dar a conocer todos los atractivos del patrimonio y la gastronomía de este municipio valenciano que ayer consiguió superar toda espectativa.

«Ha sido increíble, ha habido una afluencia bárbara. Esperábamos repartir 2.000 kilos de cerezas, pero estoy segura de que han sido muchas más», indicó ayer la alcaldesa de Serra Alicia Tusón muy «satisfecha» y «orgullosa», ya que después de seis años siguiendo la fiestas de Serra en la retaguardia como concejala del Ayuntamiento, «por fin» podía disfrutarla como alcaldesa.

En cuanto a la repartición de las cerezas a los vecinos que se acercaron ayer a la localidad para disfrutar del festejo (incluido dentro de la Fira de la Calderona), esta corrió a cargo de la reina de las fiestas, Blanca García Sala, que, vestida con el traje típico valenciano repartió entre los miles de visitantes cestas con 250 gramos de esta fruta veraniega.

La entrega se inició bien entrada la mañana, a las 12 horas. Esta fue precedida por exhibiciones de oficios tradicionales de la Calderona, en las que se pudo ver una exposición fotográfica en el Casal de Sant Roc, la demostración de forja y talleres de alfarería y fabricación de velas con cera; además de venta y degustación de productos gastronómicos locales. «También han estado presentes las localidades de Nàquera, Olocau, Marine y Gátova», celebró la alcaldesa de Serra.