Entre 70.000 y 80.000 litros de agua al día. Es la cantidad que comprobó el Ayuntamiento de Utiel que se estaba despilfarrando durante el mes de julio en su piscina cubierta municipal por culpa de sus deficiencias y, también, el gran motivo por el que decidió cerrarla. Tras más de dos meses de trabajos y una inversión de alrededor de 100.000 euros, los responsables del consistorio utielano esperan poder abrir la instalación a principios del próximo mes de octubre, siempre y cuando las fugas de agua se limiten al máximo.
Los problemas que padecía la piscina de Utiel no son recientes, sino que vienen desde su misma inauguración, poco antes de las elecciones municipales de 2015, según denunció su actual alcalde, Fernando Benlliure, del PSOE. «En el momento de inaugurarse ya se conocían las deficiencias, pero se abrió meses antes de las elecciones a marchas forzadas porque el anterior equipo de gobierno del PP quería inaugurarla sí o sí pese a los problemas que tenía», criticó Benlliure.
De hecho, según señaló el propio alcalde, los técnicos tenían constancia de que la instalación perdía 10.000 litros de agua diarios, por lo que tenían programado hacer una parada técnica el año que viene para subsanar las deficiencias. Sin embargo, el pasado mes de julio, se constató que las pérdidas de líquido iban en aumento y llegaban hasta los 3.000 litros a la hora, lo que supone entre 70.000 y 80.000 litros despilfarrados cada jornada. Es más, fuentes municipales aseguran que, ante tal fuga, la piscina se quedó prácticamente vacía.
Diez años para su construcción
Alrededor de diez años tardó en ser una realidad la piscina cubierta municipal de Utiel desde el momento en que se firmó el proyecto, con el PP al mando en el ayuntamiento. De hecho, empezó a construirse en 2005, pero la falta de presupuesto provocó que se paralizaran las obras durante cierto tiempo. Al final, se abrió en febrero de 2015 por un coste total de 1,9 millones, cuando se presupuestó inicialmente en 1,4 millones de euros.
