La decisión de la conselleria de Agricultura y Medio Ambiente de prohibir indefinidamente la quema de restos agrícolas, a menos de 500 metros de una masa forestal está causando gran preocupación entre los agricultores de Requena-Utiel. Alguno de ellos ha manifestado que «no sabemos que hacer con los restos de la poda de vides, olivos y almendros que años atrás hemos eliminado mediante el fuego».

Desde la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) advierten que la mencionada prohibición genera «graves problemas de gestión en las parcelas». Sobre esta cuestión su presidente, Cristóbal Aguado manifestó que «somos plenamente conscientes de las consecuencias catastróficas que entraña un incendio y de la necesidad de extremar las precauciones, pero tampoco hay que perder de vista que si se obliga con esta medida a que los agricultores acumulen en sus explotaciones los restos de poda, éstos se convertirán en un auténtico polvorín de cara a los próximos meses y cuando el riesgo de incendio sea aún mayor».