Los problemas con la plantación de viñas para producir uvas para cavas que tienen un grupo de viticultores de Requena no han finalizado todavía. Al menos una veintena de viticultores han recibido las autorizaciones a través de la Conselleria de Agricultura para plantar viñas, pero con la condición de que las uvas que produzcan no se podrán destinar a elaborar cavas. Por tanto, solo serán aptas para la elaboración de vinos.

Uno de los viticultores afectados declaró que no descartan presentar «un recurso contra la resolución que deja fuera a nuestras nuevas viñas de la producción de uvas para cavas». «En total -agregó- el número de hectáreas afectadas supera las 100». Estas hectáreas «fueron comprometidas en los planes de reestructuración y reconversión de viñedos de la Unión Europea para la producción de uvas destinadas para elaborar la bebida espumosa», según los viticultores.