Más de 150 personas participaron el pasado domingo en la tradicional romería a la ermita del Puig para reivindicar la recuperación del inmueble del siglo XIV. En la cita participaron representantes de las tres formaciones de la oposición en Xàtiva (Compromís, Esquerra Unida y PSPV), así como diversas asociaciones de la comarca, como son Amics de la Costera, el Centre Excursionista de Xàtiva, la parroquia de Sant Pere, la Asociación Cultural 0 d'Octubre de Genovés, Gent de la Torre d'En Lloris o el colectivo la Sènia de Llocnou d'En Fenollet, que se encargó de la lectura del manifiesto de la romería, que ha cumplido veinte ediciones. Desde la Plataforma Salvem el Puig emplazaron a las autoridades a retomar y culminar la intervención en la ermita gótica y lamentaron que las obras en el inmueble llevan «dos años paradas».
Después de años movilizaciones, la ermita fue objeto de unos trabajos de consolidación que permitieron desterrar el peligro de derrumbe que amenazaba con la desaparición total el edificio en 2010. Sin embargo, la Plataforma advierte de que todavía queda mucho camino para recuperar este «símbolo del patrimonio artístico e histórico» a falta de una serie de tareas necesarias para restaurar los elementos arquitectónicos más específicos y así «poder disfrutar de su belleza gótica».
La concentración de este año, como es habitual, partió de la plaza de toros de Xàtiva a primera hora de la mañana. Desde allí, los asistentes iniciaron la ascensión al Puig ayudados por cañas facilitadas por la organización. Después de comer también se repartió entre los participantes mistela y mona de pascua. Un grupo de tabaleters y dolçainers amenizó el descanso.
Compromiso desde 2010
A partir de 2010, las inversiones de la Diputación de Valencia como consecuencia de la presión ciudadana permitieron frenar el deterioro del inmueble del siglo XIV y salvaguardarlo. Desde hace dos años, sin embargo, no se produce ninguna intervención en su seno, según señalan desde la Plataforma cívica. A pesar de encontrar limpio su interior el domingo, la entidad alertó en agosto de que unos vándalos habían lanzado varios sillares de piedra desde lo alto de la ermita. A partir de este hecho, los colectivos que velan por la protección del Puig demandaron a las autoridades que extremaran la seguridad de las obras.
