El CD Llosa tiró de orgullo para sacar adelante un partido de vital importancia que se le puso cuesta arriba a la media hora con el tanto visitante. Ganar al Massanassa era más de medio billete para la permanencia en la categoría y los hombres de Carlos Romeu salieron dispuestos a comerse a su rival, pero, de forma sorprendente, era el equipo foráneo el que se adelantaba en el marcador.
Con una hora de partido por delante, el Llosa tuvo que trabajar de lo lindo para que la ansiedad no le devorara. La insistencia tuvo su premio en el tramo final con los goles de los «Danieles», Bosch y Pachika, que dejaban los puntos en El Sequiol (2-1). El empuje de la grada fue decisivo para que el Llosa no desfalleciera en ningún momento, pese a que el transcurrir de los minutos era el peor enemigo. Carlos Romeu ha querido agradecer públicamente el comportamiento de la afición con el equipo. «La gente era consciente de la trascendencia de sacar adelante el encuentro y, cuando peor lo empezábamos a pasar, fue la que nos alentó para ir a por todas. Ha sido la afición la que ha conseguido que remontáramos el partido».
A por la permanencia
El CD Llosa le ha metido once puntos de diferencia más el gol average al Massanassa, que ocupa la penúltima posición de la tabla. Los de Romeu han dado un paso hacia la permanencia, pero aún les quedan cinco jornadas de sufrimiento. Los cuatro puntos de margen con el Atlètic d'Alginet, que ocupa la plaza de promoción de descenso, es la referencia en estos momentos. Ahora, el Llosa tiene una salida complicada a Dénia y, posteriormente, afrontará dos partidos consecutivos en casa, el El Sequiol, contra el Jávea y el Chella.
