El alcalde de Anna, Miguel Ramírez, ha recibido la bendición de la dirección provincial de su partido para volver a encabezar la candidatura del PP en esta localidad. Mientras tanto, el juzgado de primera instancia e instrucción nº 3 de Xàtiva mantiene abierta la causa por la que Ramírez tuvo que declarar en febrero tras ser denunciado por la Guardia Civil, acusado de un presunto delito de defraudación del fluido eléctrico. Según han confirmado a este diario fuentes del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), el juez continúa practicando las diligencias propias de la fase de instrucción, que se iniciaron después de que el alcalde fuera detenido e interrogado por la Benemérita. Iberdrola descubrió enganches fraudulentos a la red eléctrica tanto en el domicilio como en el chalé del edil, situación que se habría prolongado durante años y que, tal como advirtieron desde la compañía suministradora, supuso un perjuicio para el resto de usuarios de la red, al no computarse el consumo de estas propiedades. Tras tomarle declaración, la Guardia Civil puso en libertad con cargos al alcalde, investigado también por las irregularidades detectadas en el funcionamiento de un pozo municipal cuyo consumo eléctrico se redujo casi a cero durante el gobierno de Ramírez, administrador de una empresa de mantenimientos eléctricos hasta 2013.
Fuentes del PP piden respetar la presunción de inocencia y vinculan la imputación con una cuestión personal. El alcalde de Anna ha sido noticia en distintos medios en los últimos días por otro escándalo: el de la trama Imelsa, que apunta a la relación de algunos de sus familiares con la red de empresas montada por el exgerente Marcos Benavent, imputado ayer por malversación.
