Una plataforma de confluencia integrada por candidatos del PSPV, Esquerra Unida e independientes ha reconquistado un histórico bastión de la izquierda en la Vall d'Albaida después de un paréntesis de 12 años bajo dominio del PP. Llutxent, bautizada en otra época como «la pequeña Moscú» „entre 1979 y 2003 se sucedieron gobiernos del Partido Comunista, IU y PSPV en el consistorio„, es además la única localidad en la que una coalición preelectoral de este tipo gobernará con mayoría absoluta en territorio valenciano.
Unitat per Llutxent (UxLl) nació hace escasos meses bajo el propósito de aglutinar a las fuerzas progresistas de la población, dejando a un lado las siglas y los «intereses partidistas» para terminar con la disgregación que en las últimas citas electorales había pasado factura a la izquierda. En el último mandato, sin ir más lejos, el PP pudo gobernar en minoría después de que el bloque progresista no se pusiera de acuerdo a la hora de articular un pacto en 2011.
La novedosa iniciativa ha logrado cautivar al electorado. Con un respaldo del 47,5 % de los sufragios del 24M, UxLl se ha impuesto de manera clara frente al PP(con el 36,39 %) y Gent de Llutxent (con el 14,49%). Si el nuevo escenario surgido de las urnas impone el pacto como herramienta para garantizar la gobernabilidad en la inmensa mayoría de municipios, Unitat puede presumir de tener los deberes hechos: sus integrantes conforman un bloque unido que es fruto de un intenso proceso de conversaciones previas. «A nivel municipal no hay tantas diferencias partidistas. EU y PSPV han votado siempre lo mismo en todas las mociones en la última legislatura. Había que aglutinar un proyecto progresista que, sin renunciar a la ideología de cada agrupación, limara diferencias y trabajara por el pueblo, recogiendo otras sensibilidades que no se identifican con ningunas siglas», expone Pep Estornell, profesor de valenciano y cabeza de lista de la plataforma a propuesta del PSPV, aunque independiente.
Estornell pone una sola condición cuando Levante-EMV plantea una entrevista en torno a la victoria electoral: que puedan participar los seis integrantes de la formación que han resultado elegidos en las urnas. Un gesto que demuestra que esta candidatura es una piña. El futuro equipo de gobierno al completo se presenta en la redacción: tienen entre 28 y 43 años y por sus venas corre la ilusión de poder pilotar el «cambio» en Llutxent. Comparten otra característica:hasta ahora ninguno de ellos había desempeñado ningún cargo en el ayuntamiento. Gabriel Canet, número dos de la lista, proviene de EU, al igual que Amparo Blas, la número 5. Marta Català y Diego Canet „en los puestos 3 y 4„ proceden del PSPV, mientras que la sexta, Cristela Canet, es independiente. El encuentro se desarrolla horas antes de que se reúnan en privado para debatir el reparto de las áreas de un gobierno que quieren abrir a la ciudadanía. La participación vecinal „a través de la creación de nuevos consejos y comisiones„ es uno de los ejes del programa de UxLl, que por lo pronto destaca la buena disposición del alcalde saliente, José Miguel Aranda, para negociar el traspaso de poderes.
Mitin multitudinario de cierre
La formación comenzó la campaña electoral con el golpe de efecto de un video elaborado por el cineasta Toni Canet y la cerró con un mitin y una cena de sobaquillo que reunió a 200 personas en la plaza del pueblo. «Nunca se había visto tanta gente en un acto así desde el comienzo de la democracia», observa Gabriel Canet. Como en aquel momento, el proyecto ha despertado la ilusión entre muchos vecinos por su proximidad y unión. «Mucha gente mayor nos para y nos dice: 'ya era hora'», apostilla el número dos de UxLl.
