Lejos de transformar el 9 d'Octubre en una batalla de símbolos identitarios y de guerra de ideas, el gobierno municipal de Xàtiva mantuvo ayer la cordialidad que ha imperado siempre en el acto institucional de la ermita de Sant Josep. Desde el lugar por donde Jaume I inició la conquista de la ciudad, el alcalde, Roger Cerdà, pronunció un solemne discurso combativo con la marginación de la C. Valenciana en el ámbito estatal y crítico con la pérdida de peso de Xàtiva en el conjunto territorial durante los últimos años. El munícipe comenzó trazando un recorrido por la historia para reivindicar la identidad y cultura propias del pueblo valenciano y terminó exhibiendo un balance satisfactorio del «cambio de rumbo» del ayuntamiento cuando el tripartito está a punto de cumplir cuatro meses de gobierno.
Aunque apenas hubo variaciones en el protocolo habitual, el sello del ejecutivo se dejó notar en el evento de ayer. El propio alcalde y el teniente de alcalde Miquel Lorente (EU), ofrendaron una corona de laurel ante la Porta de l'Aljama mientras las notas de la Muixeranga sonaban de fondo. A continuación, representantes del Club d'Atletisme Xàtiva y de l'Escola de Danses portaron otra corona. Con este gesto, la corporación quiso premiar los éxitos deportivos del club y el sobresaliente balance del último festival Arrelats Folk. En los últimos años, las falleras mayores habían protagonizado la ofrenda en representación de los colectivos setabenses.
El himno autonómico sonó como de costumbre para cerrar el sencillo acto, en el que apenas se observaron banderas: pocas senyeras y ninguna estelada. Participaron concejales de todas las fuerzas políticas presentes en el ayuntamiento, acompañados por los máximos mandos policiales.
Durante su intervención, Cerdà apeló al «consenso social, el trabajo conjunto, la solidaridad y la concordia» para conseguir que Xàtiva pueda «recuperar el pulso de su actividad» y el peso perdido en el ámbito territorial. Un trabajo que ha de materializarse «entre todos». El alcalde manifestó que Xàtiva «ha de ser consciente de su importancia y luchar por su futuro» para «volver a ser una ciudad donde todos los vecinos tengan la oportunidad de desarrollar su proyecto de vida en armonía». Solo así „enfatizó„ «conseguiremos recuperar el prestigio perdido y hacer de ésta una ciudad prospera y con futuro». El alcalde aseguró que, durante los primeros compases de la legislatura, el equipo de gobierno «ha demostrado que las personas son la principal prioridad», abriendo las puertas de las instituciones y «multiplicando el tiempo que las concejalías dedican a atender a los vecinos desde la verdad, la honradez, el trabajo, la transparencia y la proximidad», apostilló. el primer edil-
